Los 67 jóvenes que participaron en la fiesta ilegal en el convento de Derio se enfrentan a 5 sanciones por persona
Casi 70 jóvenes fueron desalojados durante la mañana de este martes de un convento que habían alquilado para celebrar una fiesta ilegal donde las medidas de seguridad eran inexistentes. Los chavales, que se congregaron a través de las redes sociales, se enfrentan a cinco posibles sanciones.
Los jóvenes identificados por la Ertzaintza tras celebrar la noche del pasado lunes al martes una fiesta en la hospedería de un convento de Derio (Bizkaia) podrían recibir hasta cinco sanciones por persona, además de enfrentarse a una denuncia por parte de los propietarios por destrozos en el establecimiento, según ha detallado este miércoles el viceconsejero de Seguridad del Gobierno Vasco, Josu Zubiaga.
Un total de 67 jóvenes fueron identificados por la Ertzaintza tras celebrar una fiesta en la hospedería San José, un hospedaje anexo que ofrece el monasterio de Las Clarisas en Derio, a un cuarto de hora de Bilbao.
SE ENFRENTAN A CINCO SANCIONES POR PERSONA
.Según ha explicado el viceconsejero Zubiaga en Radio Euskadi, la Ertzaintza está analizando la actividad y participación de los identificados, pero "podemos hablar -ha dicho- de hasta cinco sanciones por persona" por haber infringido los límites de movilidad establecidos, así como los límites de horarios y del número de personas que se pueden congregar, las distancias interpersonales que se deben mantener y el uso de mascarillas.
Además de ello, "parece que se han producido destrozos" en la hostelería, con denuncia de los propietarios, ha indicado Zubiaga, quien ha señalado que en ese caso "habría diligencias penales por daños".
NINGUNO SALIÓ DEL CONVENTO EN TODA LA NOCHE
.El viceconsejero ha explicado que cuando la Ertzaintza se acercó al alojamiento "no se le abrió la puerta" y como en ese momento "no estaba en curso ningún delito como tal" no podía entrar sin tener autorización. También ha señalado que los propietarios dicen que desconocían el número de personas que se iban a reunir y el uso que se iba a hacer del local.
Los jóvenes se negaron a salir cuando los agentes les avisaran por megafonía de que debían evacuar el edificio. Mientras unos dormían, otros continuaron la celebración a pesar de que se les había cortado la luz y el agua, y los 67 jóvenes permanecieron dentro del convento durante toda la noche.
Ya por la mañana los jóvenes fueron abandonando el lugar, siendo identificados para la correspondiente sanción y siendo sometidos a una prueba de alcoholemia.
LA DUEÑA LO ALQUILÓ A SEIS PERSONAS Y SE CONGREGARON A TRAVÉS DE LAS REDES
.La dueña del monasterio reconvertido a hospedería asegura que lo alquiló solo a seis personas, sin imaginar que terminaría celebrándose una fiesta ilegal de casi 70 jóvenes. Fue a través de las redes sociales como los chavales se dieron cita en el lugar, donde se prometía una gran fiesta con DJs.
La Ertzaintza está también analizando la actitud de los propietarios para comprobar si se han cumplido los requisitos administrativos correspondientes.
Zubiaga ha admitido que hay diferentes opiniones jurídicas en los tribunales en cuanto a la aplicación de las sanciones, pero ha afirmado que el departamento cuenta con informes que avalan que se puede aplicar la ley de seguridad ciudadana en estos casos.