Muere una mujer después de recibir un trasplante de pulmones infectados de coronavirus
A los pocos días de someterse al trasplante, la mujer comenzó a tener síntomas del virus.
La mujer, que padecía una enfermedad obstructiva crónica, recibió en otoño un doble trasplante de pulmón. A los tres días, comenzó a tener síntomas graves asociados al COVID-19, como son la dificultad para respirar y la fiebre.
La donante había fallecido por un accidente cerebrovascular tras un accidente de tráfico. A pesar de que no presentaba síntomas del virus, se le realizaron las pruebas correspondientes, un protocolo ya muy habitual y obligatorio en la mayoría de hospitales y centros de salud. Los resultados salieron negativos, así que se dio luz verde al trasplante.
Los médicos no sabían que la prueba había sido errónea y que los pulmones estaban infectados. Se dieron cuenta de que algo iba mal cuando a los tres días de la intervención la receptora comenzó a sufrir síntomas graves. Empeoró rápidamente y terminó sufriendo un shock séptico que le provocó la muerte. Una vez fallecida, la prueba del coronavirus se repitió y en esta ocasión el resultado sí salió positivo.
Según informa The Washingtong Post, el cirujano que efectuó el trasplante y manipuló los pulmones también se contagió, pero superó la enfermedad sin problemas.
"De ninguna manera habríamos usado los pulmones si hubiéramos tenido una prueba de COVID positiva", aseguraba Daniel Kaul, director del servicio de trasplantes de enfermedades infecciosas del Michigan Medicine, el hospital donde se realizó la intervención.
Según los expertos de la Universidad de Michigan, este puede ser el único caso probado de contagio de COVID-19 a través de un trasplante. Sea como fuere, se trata de un incidente aislado, ya que es el único caso confirmado entre casi 40.000 trasplantes realizados en 2020.