Amaia Montero nunca se fue de La Oreja de Van Gogh: las cuentas empresariales del grupo
La Oreja de Van Gogh despidió a su vocalista Leire Martínez con un breve comunicado publicado el 14 de octubre. La banda ha compartido casi dos décadas con la artista, más tiempo del que estuvo con Amaia Montero. Sin embargo, la sombra de la de Irún siempre ha estado presente: no solo a nivel musical y personal, sino también de forma económica y empresarial.
La Oreja de Van Gogh comienza una nueva y desconcertante etapa en su trayectoria tras despedir a quien ha sido su vocalista durante 17 años: Leire Martínez, quien llegó en 2008 tras el abandono de Amaia Montero.
La banda se ha despedido de su ya exintegrante con un escueto y polémico comunicado, donde la formalidad deja poco espacio a la emoción: "Después de 17 años maravillosos repletos de música y emociones que jamás olvidaremos, queremos anunciar que las trayectorias profesionales de Leire y La Oreja de Van Gogh seguirán caminos separados", aseguran.
Y así lo explican: "La decisión ha sido dura y difícil, pero llega después de mucho tiempo de reflexión y profundas conversaciones en las que no hemos conseguido acercar nuestras diferentes maneras de vivir el grupo. Termina una etapa fascinante que todos llevaremos en el corazón y que nos ha permitido disfrutar de la mejor profesión del mundo de una manera soñada".
Al parecer, el motivo detrás de estas discrepancias sería la celebración de un concierto o una pequeña gira de La Oreja de Van Gogh con Amaia y sin la que era su actual vocalista. Lo cierto es que Leire siempre ha sentido la sombra de la anterior integrante de la banda detrás de ella, y así lo explicó recientemente en una entrevista en Televisión Navarra.
"No me gustan las faltas de respeto. A mí que se diga que Amaia vuelve al grupo no me importa, no me afecta para nada, lo que no me gusta es que se me ningunee a mí cuando se dice eso. [...] A mí lo que no me gusta es escuchar y ver determinados comentarios de: 'Pues bien, qué maravilloso, que vuelva'. Pero bueno, ¿y yo qué? Parece que a todo el mundo se le olvida que hay una cantante en el grupo, que llevo 16 años. Me resulta feo eso, parece que no importa nada", dijo la vocalista.
Amaia Montero se fue, pero no del todo
Lo cierto es que Amaia Montero ha estado siempre presente en el grupo, aunque no fuera de forma musical. La Oreja de Van Gogh se creó en 1996, y tres años después la banda fundó una empresa vinculada al grupo para gestionar todos los detalles económicos: La Oreja de Van Gogh SL. Según informa Vanitatis, se creó el 29 de enero de 1999 en Bilbao a nombre de los integrantes originales: Pablo Benegas, Álvaro Fuentes, Xabi San Martín, Haritz Garde y Amaia Montero, cuyo nombre no ha desaparecido de la empresa en ningún momento.
Amaia abandonó el grupo por su propia decisión en 2007 por diversos motivos, tal y como explicó en El Rincón de Pensar. "Son muchas cosas las que ocurren y en el fondo ninguna. [...] Fueron circunstancias, no un momento concreto. Llevábamos mucho tiempo juntos, crecimos juntos. Crecimos de verdad, porque era una situación en la que estábamos muy expuestos, algo anormal para personas de nuestra edad. [...] Quizá los años, quizá que evolucionamos hacia lugares distintos, queríamos cosas distintas. [...] No fue un día... La convivencia, que es dificilísima", dijo.
Poco después, Leire Martínez llegaría al grupo, pero ella nunca formó parte de la empresa La Oreja de Van Gogh SL.
Los detalles sobre la empresa de La Oreja de Van Gogh
La empresa sigue activa a día de hoy, a nombre de los cinco miembros originales, que se reparten la sociedad a partes iguales con el 20% cada uno. Tal y como informa Vanitatis, el último cambio presentado en la cuenta data de este mismo mes de octubre.
Según el balance de 2022, su actividad es la "creación, edición, publicación y venta de obras, partituras, composiciones musicales, libros, revistas; la representación, asesoría, organización y dirección de cantantes, grupos musicales y toda clase de artistas; la creación y representación de obras dramáticas y dramático-musicales, las coreografías; y por cuenta de terceros, crear, proyectar, ejecutar y distribuir campañas publicitarias o de propaganda a través de medios de difusión, prestando sus servicios simultáneamente a varios anunciantes".
Los activos financieros corrientes de la empresa tienen un valor de 1,4 millones de euros, una cifra que desciende hasta el millón en el caso de los activos no corrientes. El total llega hasta los 2.911.341 euros.