Arturo Pérez-Reverte, de cerca: su hija Carlota, su afición por el mar, su asombrosa biblioteca y cómo se convirtió en escritor
Arturo Pérez-Reverte es escritor por accidente. Lo dice él mismo, que eligió este oficio después de 21 años trabajando como periodista. En 1994 dejó definitivamente la profesión y dos años más tarde creó, junto a su hija Carlota, su personaje más emblemático: el capitán Alatriste.
Arturo Pérez-Reverte es escritor por accidente. Nunca quiso ser novelista, lo que quería el autor de El italiano y el creador del Capitán Alatriste era viajar, conocer chicas guapas y meterse en peleas... "Y lo hice durante 21 años", aseguró en una entrevista con el XL Semanal.
"Volví de una guerra que me dejó un poco raro y decidí escribir. No tenía intención de publicarla. Y entre guerra y guerra seguí haciéndolo hasta el best seller internacional que fue La tabla de Flandes. Fue una salida, un futuro. A partir de El club Dumas me lo planteé de una forma profesional. Yo no soy un artista. A mí la musa no me visita, yo salgo a trabajar cada día", contó el autor sobre cómo pasó de ser corresponsal de guerra a escritor.
¿Por qué dejó el periodismo?
Tomó esa decisión por un problema con TVE. Licenciado en periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, había empezado a trabajar en el ente público en 1985 tras dejar el diario Pueblo y decidió dejar el puesto en 1994.
En abril de ese año presentó su dimisión. Lo hizo después de enterarse de que le querían "abrir expediente por justificar gastos en zonas de guerra con facturas falsas". Al parecer la acusación estaba basada en unas líneas de su novela Territorio comanche.
En la carta que le dirigió al director Ramón Colom le dijo, entre otras cosas, que o no tenía idea de periodismo o actuaba de mala fe. Además, le invitó a leer el libro "con detalle" para comprobar que no hay base para el expediente.
"Estoy harto de tus jefes y de ti.... Te regalo 21 años de antigüedad en el Estado (12 en Pueblo y 9 en TVE) a cambio de mi dignidad y vergüenza, palabras que te hago el honor de imaginar que conoces. Que os den morcilla", se despidió en la carta que supuso el final de su carrera como periodista.
Escritor con su hija Carlota
Dos años después de ese episodio, Arturo Pérez-Reverte creó su personaje más famoso. El capitán Alatristese publicó en 1996 con firma doble: Arturo y Carlota Pérez-Reverte.
Carlota Pérez-Reverte es la única hija del escritor y de su mujer Blanca, a la que conoció cuando estudiaba en la facultad. La joven nació en 1983. Hoy tiene 40 años, cuando publicó el libro con su padre tenía 13.
La joven se licenció en Historia y actualmente trabaja como arqueóloga subacuática en Cartagena. Su profesión le apasiona desde pequeña. "De niña, ya jugaba a excavar en el jardín y hacer agujeritos a la búsqueda de cosas. Después comprobé que bucear es una de las experiencias más maravillosas que existen. Y, además, en mi familia, el mar ha sido un elemento muy presente. Así, los dos aspectos se unieron y tuve muy claro a lo que quería dedicarme", contó en una entrevista publicada en ABC en 2017.
El encuentro con Carlota Pérez-Reverte fue con motivo del estreno en el Teatro Bellas Artes de Madrid de su obra teatral Perdona si te mato, amor, su único trabajo literario que publicó casi por casualidad en 2015. "Regalé a mis padres la obra por Navidad. En un principio, no tenía ninguna pretensión de que pudiera representarse. No obstante, la opinión positiva de varias personas que la leyeron me animó a esa posibilidad".
"Desde siempre, me ha gustado mucho escribir y recuerdo como un momento mágico y precioso la colaboración con mi padre en la primera entrega de la serie de Alatriste. Me encargaba de rastrear documentación, encontré un montón de mapas, y también mi padre me contaba lo que iba a pasar en el siguiente capítulo y yo escribía a mano en un cuaderno que él todavía conserva", explicó la joven sobre su otra pasión. "Nunca he dejado de tener el gusanillo literario".
Arturo Pérez-Reverte y el mar
Nacido en Cartagena (Murcia), Arturo Pérez-Reverte está inevitablemente ligado al mar. Ya lo decía su hija y lo dice constantemente su Instagram. Esta foto es de un curso de buceo que hizo cuando tenía 18 años.
Otras imágenes son de atardeceres, tormentas o del día que se lesionó con las escotas de su velero. "Moraleja, sin importar los años de mar que lleves maniobrando: mantén los dedos lejos de las escotas cuando esté funcionando un winche eléctrico", decía el comentario con el que acompañó la imagen.
Un cazador de libros y una biblioteca inmensa
Si el mar es una de las pasiones de Arturo Pérez-Reverte, la otra sin duda son los libros. Su biblioteca, según publicó él mismo en 2018, tiene más de 32.000.
"Supongo que una cuarta parte no la he leído, y tal vez no llegue a hacerlo nunca. Pero es que una biblioteca, además de memoria y archivo de lo ya leído, es también compañía y proyecto de vida. Nada estimula más que estar rodeado de libros por leer", respondió a un usuario de Twitter. Las imágenes de su archivo son espectaculares.
"Yo soy un cazador de libros. El instinto de caza al ir a la Cuesta de Moyano —por 15 euros te llevas un montón de ejemplares estupendos—, a las librerías de viejo en Nápoles o en París, hace que te tiemblen los dedos no vaya ser que alguien coja antes que tú la pieza que has descubierto. No soy coleccionista ni bibliófilo, soy un lector que ama mucho los libros. De pequeño nadie me recomendó libros, me los compraban", contó en una entrevista en Zenda en la que aseguró que no hay libro malo. "Hasta los libros malos tienen algo bueno, lo decía Cervantes. Un lector lee un mal libro de historia, y aunque sea malo, éste invita al lector a buscar otro. Todo libro abre la puerta al lector a otros".