Así habla Britney Spears de sus exs: el aborto con Justin Timberlake, el lío con Colin Farrell o la boda con Sam Asghari
Britney Spears se ha desnudado emocionalmente en su libro The woman in me tratando temas como la sexualización que sufrió, la tutela de su padre o la mala relación con su familia. Otro de los puntos que se tocan es los romances que la princesa del pop ha tenido y en sus memorias les dedica unas palabras a cada una de sus exparejas.
Britney Spears ya es libre, en todos los sentidos. No solo se ha despojado de la tutela abusiva de su padre, sino que también ha escrito sus memorias (The woman in me) para que todos sus fans puedan conocer sus episodios más oscuros.
El libro se ha publicado recientemente y durante los días hemos adelantado algunas historias como su audición para El diario de Noa, que la obligaron a consumir litio o lo sexualizada que fue de adolescente.
Además, las memorias recogen algunos de sus romances más conocidos como Justin Timberlake, Colin Farrell, Jason Alexander o Sam Asghari.
Repasamos todo lo que dice sobre cada uno de ellos.
El aborto secreto con Justin Timberlake
El primer novio de Britney fue Justin Timberlake, al que conoció en el programa de televisión The Mickey Mouse Club. Ambos eran niños y se hicieron rápidamente muy amigos. En el libro, ella explica que su primer beso fue jugando a Verdad o Reto y varios años después terminaron siendo pareja.
"Muy pronto me di cuenta de que estaba perdidamente enamorada de él, tan enamorada de él que era patético", escribió. No todo fue tan bonito como parecía porque él la engañó "un par de veces" con una cantante de All Saints y una bailarina suya.
El gran problema llegó en el 2000 cuando la estrella se dio cuenta que estaba embarazada: "Fue una sorpresa, pero para mí no fue una tragedia. Amaba mucho a Justin. Siempre esperé que algún día tuviéramos una familia junta. Esto sería mucho antes de lo que había anticipado. Pero definitivamente no estaba contento con el embarazo. Dijo que no estábamos listos para tener un bebé en nuestras vidas, que éramos demasiado jóvenes".
Sobre el aborto, contó: "No sé si esa fue la decisión correcta. Si hubiera dependido solo de mí, nunca lo habría hecho. Y, sin embargo, Justin estaba tan seguro de que no quería hacerlo"."Hasta el día de hoy, es una de las cosas más agonizantes que he experimentado en mi vida".
Su aventura con Colin Farrell
En 2003, después de romper con Justin, Britney tuvo una aventura con Colin Farrell de un par de semanas. Ella los define como que "estaban siempre uno encima del otro" y tenían "mucha pasión, como en una pelea callejera".
"Como me había pasado antes cuando me sentía demasiado apegada a un hombre, traté de convencerme por todos los medios de que no era gran cosa, que solo nos estábamos divirtiendo, que en este caso yo era vulnerable porque aún no había superado a Justin", reflexiona.
Su boda en Las Vegas con Jason Alexander
Entre fiesta, copas y música, la princesa del pop se casó de forma improvisada en Las Vegas en 2004 con Jason Alexander: "Ni siquiera recuerdo esa noche en absoluto, pero por lo que he reconstruido, él y yo holgazaneamos en la habitación del hotel y nos quedamos despiertos hasta tarde viendo películas... luego tuvimos la brillante idea de ir a Una Pequeña Capilla Blanca", escribió.
"La gente me ha preguntado si lo amaba. Para ser claro: él y yo no estábamos enamorados. Honestamente, estaba muy borracha y probablemente, en un sentido más general en ese momento de mi vida, muy aburrida", dijo.
El duro divorcio con Kevin Federline
Poco después, llegó su primera gran relación junto a Kevin Federline. Fue un auténtico flechazo.
"Inmediatamente, desde el momento en que lo vi, hubo una conexión entre nosotros, algo que me hizo sentir que podía escapar de todo lo difícil de mi vida". La primera decepción vino cuando se enteró al tiempo que ya tenía un hijo y su exnovia estaba embarazada de ocho meses: "Estaba viviendo en una burbuja... "No tenía idea hasta que estuvimos juntos por un tiempo y alguien me lo dijo".
La cantante tuvo junto a él sus dos hijos -Sean y Jayden- y ha reconocido que durante sus embarazos, "el sexo era absolutamente asombroso".
Como expresa, el divorcio se vio acelerado porque Kevin "fue cautivado por la fama y el poder" y el resultado fue que le costó mucho volver a confiar en los hombres: "Eso es algo que Justin y Kevin arruinaron de mí. Solía confiar en la gente. Pero después de la ruptura con Justin y luego de mi divorcio, nunca volví a confiar en la gente".
Y lo acusa de "convencer a todos de que estaba fuera de control" durante la batalla legal por la custodia de sus hijos.
Adnan Ghalib la engañó
Aunque no lo menciona directamente, también habla de su relación con Adnan Ghalib, al que se dirige como "el fotógrafo".
"Estaba completamente enamorada de él. Había sido un paparazzi y entendí que la gente pensaba que no tramaba nada bueno, pero todo lo que pude ver en ese momento fue que era caballeroso y me ayudó". Confiesa que no sabía que estaba casado y "ella era esencialmente su amante".
De pareja a cotutor, su relación con Jason Trawick
Britney conoció a Jason Trawick gracias a su hermano Bryan: "Él era diez años mayor que yo y realmente tenía su vida en orden. Me encantó que no fuera un artista sino un agente, así que conocía el negocio y entendía mi vida",
Pero entraron en caída libre cuando se convirtió en su cotutor y ella se dio cuenta que "sus sentimientos cambiaron".
"Ahora veo que tenerlo vinculado con la organización que controla mi vida podría haber jugado un papel en agotar el romance de nuestra relación". Notó que ya no lo amaba y él la dejó, lo que a ella no le importó. Parece no ser del todo cierto porque tras la separación él tuvo una "crisis de identidad": "Se puso mechas de colores en el pelo, iba al muelle de Santa Mónica y montaba en bicicleta todos los días con un grupo de tipos tatuados".
El orgullo la separó de Charlie Ebersol
En 2015 se enamoró del productor Charlie Ebersol y rompieron después de "una pelea estúpida".
"Charlie y yo éramos tan orgullosos que dejamos de hablarnos. Fue lo más tonto. No me atrevía a hablar con él y él tenía demasiado orgullo para hablar conmigo".
Un final feliz con Sam Asghari
Y cerramos la historia con Sam Asghari, su último marido y del que se ha separado hace pocos meses. Eso sí, solo tiene bonitas palabras para él: "Supe que lo quería en mi vida de inmediato. Me enamoré al instante", revela sobre el día que lo conoció en el rodaje del videoclip de Slumber Party.
"La química entre nosotros al principio era una locura. No podíamos quitarnos las manos de encima. Me llamó su leona", escribe, explicando por qué lo admiraba tanto: "Su coherencia al hacer ejercicio, ser un buen hombre, estar saludable, cuidarme y ayudarme a aprender cómo podemos cuidarnos unos a otros".
Su relación fue a mejor cuando se libró de la tutela porque pudieron "establecer una nueva vida juntos, sin limitaciones, y casarnos". A mediados de 2022, Britney y Sam se casaron en una preciosa ceremonia: "Una hermosa celebración de todo lo que habíamos pasado juntos y cuán profundamente deseábamos la felicidad del otro".
En el libro no se habla de la separación, aunque TMZ asegura que la cantante hizo cambios en el libro antes de publicarlo, así que si no lo mencionó fue intencionadamente.