Así es Sopa, el perro adoptado de Aitana, y su trágica historia
Son muchos los cantantes que demuestran en las redes sociales su amor por los animales. Aitana es una de ellos y lo demostró este verano adoptando a Sopa, un cachorro de dos meses.
Solo tenía dos meses cuando llegó a la casa de Aitana y lo hizo tras el confinamiento. En su cuenta de Instagram, la cantante contó el proceso de adaptación de su perrita y, fotografía a fotografía, nos hemos ido enamorando de esta cachorrita inquieta.
"Ella es Sopa (o Sopita), tiene apróximadamente dos meses, se duerme donde pilla y, sobre todo, donde tendría que hacer pis (el empapador). Ella se cree que es su cama", contó en la imagen de presentación que publicó en su Instagram.
En ese post, Aitana también quiso dar las gracias a la asociación que había ayudado a esta perrita que ahora forma parte de su familia. "Gracias @huellasaccitanas por todo lo que hacéis por ellxs y por haberme dejado adoptar a Sopita".
Todos los seguidores de Aitana conocen a Sopa y han visto cómo ha ido creciendo desde aquel 7 de julio que llegó a casa de la cantante. La perrita disfruta de los mejores cuidados y se pasa los días jugando con su nueva familia. En Instagram hemos sido testigos de sus carreras por la casa y también de sus paseos por la nieve.
Vivía en la calle
Aunque ahora es un perro feliz, la historia de Sopita no siempre ha sido tan sencilla. "Conocimos a Loba con la primera foto, abandonada, pidiendo la ayuda que nadie le dio. Cuando fuimos por ella nos la encontramos empapada, hecha una sopita, porque les molestaba y estaba llena de bichos. No la querían durmiendo en su calle y portales por si les pegaba algo, así que echaban cubos de agua encima de ella", explicaba la asociación que recogió a la perrita de las calles de Guadix (Granada).
El post enterneció a la cantante, que no dudó ni un segundo en ponerse en contacto con la asociación para iniciar los trámites de adopción de la perrita, un acto que fue alabado por todos los que trabajan allí. "Hoy me encantaría que esas personas leyeran este post, porque Loba se ha convertido en SOPA y va a vivir como se merece gracias a que Aitana se enamoró rápidamente de ella y no dudó en adoptarla", y es que sin duda esta es una historia "que empezó mal pero que ha tenido un final feliz".
Gestos como el de Aitana ayudan a visibilizar el problema que viven numerosos animales que son abandonados y el duro trabajo de las asociaciones que, sin apenas recursos, trabajan duramente para recogerlos de la calle y buscarles un nuevo hogar.