Bombitu, el conejo influencer de Miki Núñez

Tiene más de 10.000 seguidores en Instagram. Bombitu, el conejo de Miki Núñez, es toda una estrella de las redes sociales. Convertido en influencer por Miki y su novia Sara Roy, el día a día del conejo es seguido por sus followers que han quedado rendidos a los encantos de este pequeño animal.

Bombitu es un conejo adoptado que llegó a la familia de Miki Núñez en agosto de 2020 cuando solo era un cachorrito. Poco a poco, hemos visto al animalito crecer gracias a sus publicaciones en Instagram y el resto de redes sociales del cantante. Hemos disfrutado de sus vídeos en busca de zanahorias, hemos sido testigos de sus correteos por la casa y hasta de cómo acaba metido en cajas.

Bombitu tiene enamorados a todos sus seguidores y no es de extrañar que acumule miles de seguidores en Instragram.

Pero este simpático conejo no es el único miembro peludo de la familia. Miki y Sara también tienen adoptada a una perrita de la raza japonesa Shiba Inu a la que han puesto por nombre Blue.

Las dos mascotas se llevan a las mil maravillas y cuando la pareja está en casa, corren libremente por todas las estancias. Sin embargo, según explicó el cantante en una entrevista reciente para RAC1, cuando ellos abandonan el hogar, dejan a los animales en habitaciones separadas. "Cuando Blue ve algo con pelo que corre moviéndose se acerca y eso podría asustar mucho en Bombu, y no lo queremos".

Calma en el hogar

Los dos animales han llegado a la familia de Miki Núñez tras el inicio de la pandemia. En medio de una situación que ha provado más de una preocupación y que ha agudizado las enfermedades mentales, el cantante asegura que sus dos mascotas "aportan mucha calma. Con ellos desconectas de todo".

La pareja ha encontrado en su rutina con sus mascotas una vía de escape para la "vida desenfrenada" de tienen. El momento de pasear con Blue aporta tranquilidad: "es el momento de no móviles, no charlar. Solo Bombu y Blue. La rutina de cada momento, cada cosa", asegura el cantante.

Los cuatro son muy felices y, quién sabe, igual la pareja se anime a seguir empliando a la familia.