Chris Brown habla sobre su agresión a Rihanna: “Ella me escupía sangre en la cara después de golpearla”

Parece que Chris Brown quiere seguir sacando tajada de su relación con Rihanna, o al menos seguir removiendo temas de lo más delicados. En un nuevo vídeo de su documental Welcome To My Life, el cantante explica qué ocurrió en la fiesta previa a los Grammy de 2009 que terminó con una condena de 5 años en libertad condicional y 6 meses de servicio comunitario.

Chris Brown explica que las cosas con Rihanna empezaron a torcerse cuando él le reconoció que le había sido infiel con otra mujer, alguien con quien trabajaba a menudo: "Ella me odiaba. Después de eso, lo intenté todo, no sirvió de nada. Simplemente no confiaba en mí después de eso y a partir de ahí todo fue cuesta abajo. Hubieron peleas verbales y físicas también", explica en el documental.

Sobre la noche en la que agredió a la de Barbados, el rapero explica que se encontraban en una fiesta previa a la ceremonia de los Grammy 2009 y la mujer con la que le había sido infiel a Rihanna se acercó a saludarlo: "Me giré hacia Rihanna y estaba gritando y llorando".

Tras el encuentro, Brown explica que ambos bebieron durante la fiesta y parecía que la situación se había calmado hasta que en el coche de vuelta al hotel Rihannavio que esa mujer le había enviado un nuevo mensaje al rapero y fue cuando estalló la pelea: "Recuerdo que ella intentó pegarme y fue cuando yo le golpeé con fuerza".

Continuando con su relato en el documental, afirma que en un primer momento no fue realmente consciente de lo que acababa de hacer: "Cuando me di cuenta de lo que había pasado estaba en estado de shock y pensé '¿Por qué le he golpeado así?'". Acto seguido explica que la cantante reaccionó enfadándose aún más con él: "Empezó a escupirme sangre a la cara y eso me cabreó aún más".

Tras este duro testimonio, Chris Brown explica que aunque sigue queriendo a Rihanna, sabe que nunca podrían volver a tener una relación: "Aún sigo queriendo a Rihanna, pero voy a ser sincero, nos pelearíamos, ella me golpearía, yo la golpearía y eso nunca estuvo bien. Fue algo de lo que hablamos y dijimos, '¿Qué estamos haciendo?'".