Cuál es la relación entre Estopa y Jordi Évole: el origen de su amistad está en Cornellá
David y José Muñoz, los hermanos de Estopa, son los protagonistas del regreso de Jordi Évole a laSexta. Este domingo se emite el road trip que hicieron juntos por el desierto de Monegros, pero lo cierto es que los músicos y el periodista se conocen desde hace años. Todo empezó en Cornellá de Llobregat.
Este domingo por la noche vuelve Lo de Évole a laSexta. La nueva temporada se estrena con un primer capítulo en el que el periodista recorre junto a los hermanos Muñoz el desierto de Los Monegros (Zaragoza), un road trip en el que David y Jose han aprovechado para reflexionar sobre la fama, el paso del tiempo y la familia.
Un Ford Scort y un poco de confianza han sido los ingredientes necesarios para crear un episodio en el que los hermanos Muñoz, siempre celosos de su intimidad, acercan su vida personal al público.
Hablan de sus esposas sus hijos y el apego que tienen con sus padres apesar de haber superado ya los 40 años.
Cornellá, el municipio donde fueron "vecinos sin saberlo"
Han bautizado el capítulo comoDavid, Jose y Jordi, los mismos nombres con los que se les conocía en en Cornellá de Llobregat, municipio al sureste de Barcelona en el que nacieron y se criaron los tres.
Jordi creció en el barrio de Linda Vista y los hermanos Muñoz en San Idelfonso, donde sus padres regentaban el Bar La Española frente a la comisaría de Cornellá. No se conocían peroeran "vecinos sin saberlo".
Amigos en común, tardes en el parque, noches de fiesta... El periodista es el mayor de los tres. Jordi tiene 48 años, David 47 años y Jose 44.
"Vivimos a 100 metros el uno del otro", decía David en un especial de Salvados de 2015. "Recuerdo verlo por primea vez como El Follonero. En Salvados ha habido muchos momentazos, los domingos en mi casa eran sagrados. Recuerdo la entrevista a Felipe González, que se escapaba cuando Jordi le preguntaba", recordaba David.
Con los años cada uno hizo su vida. Jordi Évole quería ser médico pero "se le pasó pronto", tal y como contó su padre a Pronto. Empezó a trabajar de guionista en el programa de Buenafuente y ahí nació El Follonero, personaje que más tarde evolucionaría para convertirse en un periodista de investigación incisivo y perspicaz. Su formato Salvados triunfó durante años hasta que la cataplexia que sufre le obligó a hacer un pequeño parón y bajar la intensidad de trabajo.
Por su parte, los Estopa saltaron directamente de la fábrica de Seat a los escenarios. David y José Muñoz salieron se dieron a conocer gracias a Mari Paz -novia y actual mujer de David-, que se paseó con una maqueta llena de temas por todas las discográficas de Madrid. Cayó en buenas manos, firmaron su primer contrato y en 1999 editaron el álbum debut con temas como Tu Calorro y La Raja de Tu Falda. Había nacido un fenómeno.
Estopa, la banda sonora que Évole elige para ir con su hijo en el coche
Ya no son aquellos niños que corrían pr el barrio. Los tres han formado sus familias. David con Mari Paz, su novia de toda la vida, Jose con Paloma, con la que también lleva saliendo desde siempre, y Jordi con Ester, con la que tiene un hijo, Diego.
A Diego es al que le pone la música de Estopa cuando van juntos en el coche. Al periodista le enorgullece dejarle esa herencia musical a su hijo. "'Papa, ponme otra vez la 12'. Esta es una de las frases que más escucho en el coche cuando llevo a mi hijo atrás. Él se encapricha de una canción y quiere que se la ponga todo el rato. Y la primera vez que nos pasó fue con un disco de Estopa. Será su primer recuerdo musical, y yo pensaré que algo he hecho bien como padre porque los primeros temas que se aprendió eran de unos amigos míos de Cornellà", escribía el periodista en una reseña para Sony sobre el álbum Rumba a lo desconocido.
La carta de amor de Jordi Évole a Estopa
Lo de Évole con Estopa va mucho más allá de la conexión de la infancia. Su música ha formado parte de la banda sonora de su vida y cada vez que hay un nuevo estreno se alegra como si fuesen familia.
"Algunos pronosticaron que lo de Estopa iba a ser flor de un día, que esto de los dos hermanos excurrantes de la SEAT estaba muy bien como reclamo marketinero, pero que su éxito iba a durar menos que la raja de una falda. Pero se olvidaron que lo que a veces parece marketing resulta que es auténtico. Y que cuando sales de abajo no se te olvida tan fácilmente de donde vienes, no se te olvida que la suerte existe pero mejor que te pille currando, y es lo que ellos no han parado de hacer estos más de 15 años", explicaba en el mismo comentario para Sony sobre aquel Rumba a lo Desconocido, que publicaron en 2015.
"Poquito a poco me han ido colocando sus temas como tracks de la banda sonora de mi vida. Los dos chavales que se ponían en el campillo de delante de mi casa de Cornellà, con dos guitarras y se pasaban la tarde entera rasgándola. Qué orgulloso estoy de vosotros. De que seáis tan buena gente. De que no se os haya ido la olla. O de que se os vaya pero nunca por culpa del éxito. De que hayáis sabido madurar tan bien. Sin tonterías. Sin concesiones. Haciendo lo que sabéis hacer y cada vez mejor. Es como si llevaseis quince años haciendo el triplete", destacó.