Las dos joyas de gran valor con las que Isabel II pidió ser enterrada
Aunque su joyero está repleto de piezas de incalculable valor, la Reina Isabel II será enterrada con dos joyas muy importantes para la soberana.
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98 broches, 34 pendientes y 15 anillos son algunas de las piezas que forman la inmensa colección privada de joyas de la Reina Isabel II, que se calcula que puede llegar a albergar hasta 300 piezas.
No se trata de las joyas oficiales de la Corona. Esas se mantienen a buen recaudo en la Torre del Oro de Londres desde el siglo XVII.
Tras conocerse la muerte de la Reina el pasado 8 de septiembre, estos días se sucederán los diferentes actoS protocolarios que están establecidos hasta que tenga lugar le próximo lunes 19 el funeral de estado por la monarca, día que además se nombrará festividad en Reino Unido.
Según ha contado Lisa Levinson, jefa de comunicación del National Diamond Council, se espera que la Reina sea enterrada con dos piezas de gran valor sentimental: suanillo de boda y un par de pendientes de perlas.
Una decisión que vendría impulsada por el afán de la Reina de preservar su joyero privado como un legado no solo para la Familia Real, también para su nación y la Commonwealth.
La alianza de bodas con el que se presupone que será enterrada, elaborado con oro galés, fue un regalo que le hicieron sus padres en el año 1923 para su futuro matrimonio, que tuvo lugar en el 47, año en el que se dio el sí quiero con el Príncipe de Edimburgo. Los materiales para su fabricación fueron extraídos de la mina de oro de Clogau St. David.
No es el mismo anillo que el de su compromiso. Esta sortija, según la experta, la heredará su hija Ana, la única mujer entre sus vástagos. La pieza contiene diamantes de una de las tiaras de su suegra, Alicia Battembebrg.
"Su Majestad es una mujer increíblemente humilde de corazón que es poco probable que esté vestida con algo más que su simple anillo de bodas de oro galés para descansar y un par de pendientes de perlas", explicó Lisa Levinson a Metro.