Unos jóvenes se cuelan en la casa abandonada de Luis Miguel y graban su lamentable estado
La mansión, de 36.000 metros cuadrados, se encuentra en un estado muy diferente al que en su día disfrutó el cantante Luis Miguel.
Luis Miguel disfrutó en sus años de mayor éxito de una enorme mansión ubicada en Acapulco (México), uno de los destinos turísticos más conocidos y más lujosos de las costas del país del tequila y la michelada.
Allí pasó largas temporadas, días de vacaciones y celebró fiestas, pero a día de hoy el lugar se encuentra prácticamente en ruinas. Las humedades de las paredes, la piscina vacía y las ventanas rotas son testigos del paso del tiempo, pero hay multitud de detalles con los que podemos hacernos una idea de cómo era la casa en sus buenos tiempos: un ascensor dorado, grandes columnas, suelo de mármol, un sofá blanco que todavía sigue en el lugar donde lo dejaron...
"Un paraíso", se escucha decir al joven que graba el vídeo, que junto a unos amigos decidió aprovechar su visita a Acapulco para colarse en la casa de El Sol de México. Los tres jóvenes muestran el desmejorado estado de la mansión, de 36.000 metros cuadrados y ubicada a pocos metros del mar.
"Aquí bañaba a sus cocodrilos", dice el chaval, que móvil en mano va grabando este particular"house tour" de la mansión abandonada de Luis Miguel.
Fue en el año 2013 cuando el cantante decidió vender esta propiedad por 6 millones de euros a una inmobiliaria mexicana, ya que con los años espació cada vez más sus visitas. El lamentable estado de la casa a día de hoy no es responsabilidad del artista, pero sí nos acerca un poco al lado más íntimo del cantante.