Madonna se enfada y abandona Portugal porque no le dejan entrar a caballo en un palacio

Madonna lleva al menos dos años viviendo en Portugal, país que la ha acogido con los brazos abiertos. Entre los privilegios que ha tenido la cantante por parte del país luso, destaca una rapidísima expedición de la residencia portuguesa, también que el Benfica Junior acogió en su plantilla a uno de sus hijos adoptivos y, entre otros, el Ayuntamiento le concedió a buen precio un solar donde poder aparcar sus numerosos automóviles.

Sin embargo, esta bonita relación ha llegado a su fin. Y todo por culpa de un caballo. La cantante, que está a punto de publicar un nuevo trabajo discográfico, quería grabar uno de sus nuevos videoclips en un Palacete del siglo XIX de Sintra, Quinta Nova de Assunçao.

Hasta ahí todo bien. El equipo de la cantante pidió los permisos para grabar en la localización durante 5 días y se los concedieron, pero lo que no les concedieron fue el permiso para meter un caballo en el palacio. Las autoridades lo consideran un riesgo para la seguridad del edificio, ya que "el piso no es estable y eso impide la utilización de actividades que provoquen vibraciones".

Así las cosas, Madonna no estaba dispuesta a que las cosas no salieran como ella quería. Llamó a su agente (que removió cielo y tierra para cumplir los deseos de la reina del pop), pero era imposible.

La decisión de la cantante fue abandonar el país rápidamente, como alma que lleva el diablo. "Ya di tanto a este país y cuando pido un simple favor, que además es para enseñar Portugal al mundo la respuesta que obtengo es negativa". Esas son las palabras que El Correo de Mañana asegura que la cantante dijo a su manager.

Según medios locales, se ha visto como su flota de coches abandonaba el palacio-hotel Ramallete, donde la intérprete se ha hospedado el último año.