Ordenan prisión provisional para Rafael Amargo por riesgo de fuga al no firmar en el juzgado
Rafael Amargo ha entrado en prisión este viernes 3 de noviembre, donde deberá permanecer hasta el mes de abril cuando se celebre el juicio que tiene pendiente por vender droga en su casa.
La Audiencia de Madrid ha ordenado el ingreso en prisión del bailaor Rafael Amargo por riesgo de fuga y por quebrantamiento reiterado de la obligación de firmar en el órgano judicial semanalmente. El artista deberá permanecer en la cárcel hasta que se celebre el juicio que tiene previsto el próximo mes de abrilacusado de vender droga en su casa.
Según ha confirmado a EFE el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), la Sección 30 de la audiencia madrileña ha ordenado su ingreso en prisión este viernes 3 de noviembre tras la celebración el jueves de una comparecencia en la que la Fiscalía pidió esta medida por "quebrantamiento reiterado" de la obligación de firmar en la Audiencia cada semana.
A mediodía de este viernes, Rafael Amargo estaba ya en los calabozos de la Audiencia Provincial de Madrid, desde donde será conducido a la prisión madrileña de Soto del Real.
Nueve años de cárcel
El bailaor fue detenido el 2 de diciembre de 2020 en una operación contra una organización criminal dedicada al tráfico de drogas. No tardó en salir en libertad y un año después, en diciembre de 2021, la Fiscalía hizo una acusación formal pidiendo nueve años de prisión para el artista Rafael Amargo por un delito contra la salud pública, al considerar que vendió drogas en su propio domicilio a terceras personas de manera "persistente" a cambio de dinero.
En el escrito de acusación también se solicitaron nueve años de cárcel para el productor Eduardo de Santos porque actuaba de forma "conjunta" con Amargo en la compra y posterior distribución de dichas sustancias, así como seis años para el socio Miguel Ángel B.A. por ser un "hombre de confianza" que entregaba la droga a los compradores.
Al contrario, la Fiscalía no pidió pena para la pareja de Rafael Amargo, Luciana Bongianino, a la que en cambio el juez del caso sí considera, junto a los otros tres acusados, posible autora de un delito contra la salud pública y otro de pertenencia a grupo criminal.
Amargo era el cabecilla: movía metanfetaminas utilizando 'mulas'
El juez del caso concluyó la investigación a finales de 2021 y consideró que el bailarín era el cabecilla de un grupo que traficaba con droga, fundamentalmente metanfetamina, que vendían desde el piso que compartía con su mujer, utilizando "mulas" que llevaban la droga a los compradores. Así dio traslado al Ministerio Público y a las acusaciones particulares para que formularan escrito de acusación, solicitando la apertura de juicio o bien el sobreseimiento de la causa.
La Fiscalía concluyó en diciembre de 2021 que Amargo cometió un delito contra la salud pública al vender en su propio domicilio sustancias estupefacientes a terceras personas de manera "persistente" a cambio de dinero, actuando de forma "conjunta" con el productor Eduardo de Santos y el otro socio investigado. A tal fin adquirían la sustancia de manera "conjunta" a los distintos suministradores, para posteriormente repartirla entre ambos y venderla a terceras personas.
Así, Amargo vendía las sustancias estupefacientes a las personas que acudían a su domicilio de Madrid, y otras veces "hacía llegar la sustancia al lugar donde el cliente indicaba, para lo cual se valía de su hombre de confianza el también acusado Miguel Ángel B. L.", quien sabía lo que portaba y que "después de hacer la entrega regresaba al domicilio para entregarle el dinero obtenido con la venta"
La policía llevaba tiempo investigando a las puertas del domicilio
A modo de ejemplo la Fiscalía relató que el 27 de abril de 2020, este socio fue sorprendido por la Policía cuando se disponía a entregar a un cliente, a cambio de 50 euros, una bolsita con metanfetamina con un peso neto de 0,943 gramos y una pureza del 76,7%, con un valor en el mercado ilegal de 24,42 euros en su venta por gramos, sustancia que había recogido minutos antes del domicilio de Amargo, "donde debía regresar para entregar el dinero".
Asimismo, a raíz de los dispositivos de vigilancia que se establecieron sobre el domicilio del bailarín, los agentes observaron "como acudían numerosas personas que, tras acceder al mismo y permanecer en el interior escasos minutos, salían nuevamente de manera apresurada, procediendo la policía a identificar a dos de ellas, interviniendo sustancia estupefaciente que se había adquirido en dicho domicilio, levantándose las correspondientes actas de aprehensión".
El registro en casa de Amargo y su socio Eduardo de Santos
La Fiscalía recordó también que por auto del 1 de diciembre de 2020, dictado por el Juzgado de Instrucción número 48 de Madrid, se autorizó la entrada y registro en los domicilios de los acusados y en la casa de Amargo se intervinieron tres botes de "Popper" (nitritos de alquilo), una bolsita con feniletilamina con un peso neto de 0,089 gramos, y un frasco con seis mililitros de "GBL" con un valor en el mercado de 314,19 euros en su venta por gramos.
En el caso de Eduardo de Santos los agentes decomisaron, entre otras sustancias estupefacientes como ketamina y "Popper", un envoltorio de plástico con 56 gramos de metanfetamina con una pureza del 76%, con un valor en el mercado de 1.452,14 euros en su venta por gramos, y un frasco con 6,8 mililitros de "GBL" con un valor en el mercado de 356,08 euros en su venta por gramos (5.800 euros).
Rafael Amargo fue puesto en libertad y ha continuado su actividad artística tras su detención el 1 de diciembre de 2020 por un presunto delito de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.