"Mi padre me llamaba constantemente gorda": las nueve declaraciones más impactantes de Britney Spears a 'People'
Britney Spearsse prepara para el lanzamiento de sus memorias The woman in me y ha adelantado algunos fragmentos en una entrevista con People. Su primer beso con Justin Timberlake, su actuación con una serpiente en los VMA, la tutela de su padre o la infantilización que sufrió. Repasamos los titulares más impactantes que ha dejado la artista de 41 años.
Britney Spears revela que Justin Timberlake la convenció de abortar: "Yo no lo habría hecho"
Britney Spears es libre después de casi 14 años de tutela de su padre. La estrella del pop es el claro ejemplo de una artista a la que le han robado una parte enorme de su vida y está preparada para contar toda la verdad.
El próximo 24 de octubre se lanza The woman in me, un libro autobiográfico en el que por fin será ella la que hable y no le pongan otras palabras en su boca. En una entrevista exclusiva a People, la estadounidense ha adelantado varios fragmentos de sus memorias añadiendo algunos comentarios personales.
Se trata de la primera vez en muchos años que Britney se pronuncia sobre los años más duros de su vida y ella misma lo ha reflejado. A través de sus palabras con los periodistas, no ha escatimado en detalles y ha dado algunos titulares muy inquietantes e inimaginables.
Recapitulamos las frases más impactantes de la cantante.
"Alguien desafió a Justin Timberlake a besarme"
Britney recuerda su paso por el programa de televisión The Mickey Mouse Club con solo once años. Compartía pantalla con otros artistas como Christina Aguilera, Keri Russell, Ryan Gosling, Justin Timberlake y Tony Lucca.
"Era el sueño de un niño: increíblemente divertido, especialmente para una niña como yo. Pero también era un trabajo excepcionalmente duro: hacíamos coreografías treinta veces al día, intentando que cada paso fuera perfecto", explica.
Los integrantes hicieron buenas migas y celebraban juntos fiestas del pijama, donde Timberlake y ella se dieron el primer beso: "[Una vez] en una fiesta de pijamas, jugamos a Verdad o Reto, y alguien desafió a Justin a besarme. Una canción de Janet Jackson sonaba de fondo mientras él se inclinaba y me besaba".
En otra pieza que ha publicado People, aseguran que Britney se quedó embarazada de Justin y ambos acordaron que ella abortara. Él la persuadió para que no lo tuviera porque eran muy jóvenes, ya que ella tenía 19 y él 20.
"Fue una sorpresa, pero para mí no fue una tragedia. Amaba mucho a Justin. Siempre esperé que algún día tuviéramos una familia juntos, aunque fuera mucho antes de lo previsto", dice.
Añade: "Dijo que no estábamos preparados para tener un bebé en nuestras vidas, que éramos demasiado jóvenes. Estoy segura de que la gente me odiará por esto, pero acepté no tener el bebé. No sé si esa fue la decisión correcta. Si hubiera dependido únicamente de mí, nunca lo habría hecho, pero Justin estaba tan seguro de que no quería ser padre".
"Cuando mi padre bebía, se deprimía más y se encerraba"
Tras salir del Club Mickey, la joven recuperó su vida de adolescente normal y en el libro recuerda varias salidas junto a su madre a Mississippi: "Mientras estábamos allí, bebíamos daiquiris. Llamamos a nuestros cócteles "toddies". Me encantó poder beber con mi mamá de vez en cuando".
Lo tétrico era que su padre tenía otra concepción del alcohol y le provocaba efectos negativos: "La forma en que bebíamos no se parecía en nada a cómo lo hacía mi padre. Cuando bebía, se deprimía más y se encerraba. Nosotras nos volvíamos más felices, más vivas y aventureras".
"La serpiente acercó su cabeza a mi cara y empezó a silbar [en los VMA]"
Britney Spears regresó a la música con dos álbumes que arrasaron -Baby one more time (1999) y ¡Oops!... I did it again (2000)- y en 2001 tuvo una de sus actuaciones más memorables: su baile con una serpiente en I'm a slave 4 Udurante los MTV VMAs.
Mucha gente se llegó a preguntar si no había tenido miedo de subirse al escenario con el animal y lo cierto es que sí, y mucho: "Fue aún más aterrador de lo que parecía. Todo lo que sabía era mirar hacia abajo porque sentí que si miraba hacia arriba y encontraba su mirada, me mataría".
"En mi cabeza estaba diciendo: 'Solo actúa, solo usa tus piernas y actúa'. Pero lo que nadie sabe es que mientras cantaba, la serpiente acercó su cabeza a mi cara, justo hacia mí, y empezó a silbar", confiesa. "Estaba pensando: '¿En serio ahora mismo?' La maldita lengua de la serpiente me está lanzando un golpe. Bien. Ahora. Finalmente llegué a la parte donde la devolví, gracias a Dios".
"Me alegro de que no me dieran el papel de Rachel McAdams en 'El diario de Noa'"
Mientras grababa su disco Britney (2001), tuvo su primer papel en una película -Crossroads- y a pesar de lo que parece, no fue una experiencia satisfactoria: "No fue fácil para mí. Mi problema era con lo que la actuación le hacía a mi mente. Realmente me convertí en el personaje. Algunas personas actúan con el método, pero normalmente son conscientes del hecho de que lo están haciendo. Pero no tuve ninguna separación en absoluto".
Después de Crossroads, se le presentó una oportunidad que finalmente se le escapó: el papel protagonista en El diario de Noa. Estaba entre Rachel McAdams y ella y se lo terminaron dando a Rachel. "Hubiera sido divertido volver a conectar con Ryan Gosling pero, me alegro de no haberlo hecho".
El motivo era que su dificultad para separar su personalidad de la del personaje le habría afectado en su vida: "Me imagino que hay gente en el campo de la actuación que ha lidiado con algo así, donde les costó separarse de un personaje. Espero no volver a acercarme nunca más a ese riesgo laboral. Vivir de esa manera, siendo mitad uno mismo y mitad un personaje ficticio, es un desastre. Después de un tiempo ya no sabes qué es real".
"Afeitarme la cabeza y comportarme mal eran mis formas de contraatacar"
En 2008, la cantante se convirtió en el objeto de deseo de paparazzis y medios. Todos la perseguían y querían conocer los detalles más morbosos de su vida. Los efectos psicológicos para ella fueron terribles y el juez aprobó la tutela de su padre que suponía que este tendría el control absoluto de sus temas financieros y personales.
Hasta que sucedió, Britney quiso generar escándalo en la prensa y decidió raparse la cabeza entera: "La gente me decía lo que pensaban de mi cuerpo, desde que era adolescente. Afeitarme la cabeza y comportarme mal eran mis formas de contraatacar. Pero bajo la tutela me hicieron entender que esos días ya habían terminado. Tuve que dejarme crecer el pelo y volver a estar en forma. Tenía que acostarme temprano y tomar la medicación que me dijeran".
"Mi padre me decía repetidamente que me veía gorda"
La tutela puso punto y final a la libertad. Ya no eran los medios los que opinaban sobre ella, sino su propio padre e incluso en temas como su cuerpo: "Si pensaba que ser criticada por mi cuerpo en la prensa era malo, de mi propio padre me dolía aún más. Me dijo repetidamente que me veía gorda y que iba a tener que hacer algo al respecto".
"Sentir que nunca eres lo suficientemente bueno es un estado desgarrador para un niño. Él me había inculcado ese mensaje cuando era niña, e incluso después de haber logrado tanto, él continuaba haciéndome lo mismo".
"Me convertí en una especie de niña-robot"
La intérprete de Toxic seguía cantando y actuando, pero tenía un equipo detrás que la dirigía y la obligaba a interpretar siempre el papel de una niña. Al final, ella se sentía como "un robot" porque no se veía ella misma.
"Me convertí en un robot. Pero no es sólo un robot, sino una especie de niña-robot. Me habían infantilizado tanto que estaba perdiendo partes de lo que me hacía sentir yo mismo", dice.
Y apunta: "La tutela me despojó de mi condición de mujer y me convirtió en una niña. Me convertí más en una entidad que en una persona en el escenario. Siempre había sentido la música en mis huesos y en mi sangre; eso me lo robaron".
"Gané muchos premios cuando, supuestamente, estaba incapacitada"
La tutela de su padre la anuló como persona y Britney se pregunta en todos los artistas hombres que nunca se han visto en la misma situación a pesar de actuar peor: "Piensa en cuántos artistas masculinos apostaron todo su dinero; cuántos tenían abuso de sustancias o problemas de salud mental. Nadie intentó quitarles el control sobre sus cuerpos y su dinero. No merecía lo que mi familia me hizo".
No obstante, plantea una paradoja y es que durante esos años escribió el disco Blackout y este se llevó muchos premios como el VMA o el EMA.
"La cuestión es que logré mucho durante ese tiempo en el que supuestamente era incapaz de cuidar de mí mismo. A veces pensaba que era casi gracioso cómo gané esos premios por el álbum que hice mientras supuestamente estaba tan incapacitada que tenía que ser controlado por mi familia", considera.
"La tutela fue la muerte para mi creatividad como artista"
Britney Spears se muestra furiosa por el robo a su identidad y cómo consiguieron reprimir a la adulta que llevaba dentro:
"No había manera de comportarme como una adulta, ya que no me trataban como a una adulta, entonces retrocedía y actuaba como una niña pequeña; pero luego mi yo adulto retrocedía, solo que mi mundo no me permitía ser adulta".
"La mujer que hay en mí fue reprimida durante mucho tiempo. Querían que fuera salvaje en el escenario, como me dijeron que fuera, y que fuera un robot el resto del tiempo. Sentí que me estaban privando de esos buenos secretos de la vida, esos supuestos pecados fundamentales de indulgencia y aventura que nos hacen humanos. Querían quitarle ese carácter especial y mantener todo lo más rutinario posible. Fue la muerte para mi creatividad como artista", zanja.
El libro de Britney Spears se estrena el 24 de octubre.