Los padres de Amy Winehouse publican sus diarios más íntimos: "Quiero que me recuerden por ser simplemente yo"
Para conmemorar el que sería el 40 cumpleaños de Amy Winehouse sus padres van a sacar a la luz lo que la artista escribía en sus diarios. En ellos plasmaba todo lo que se le venía a la cabeza y en esas páginas nacieron canciones como Rehab, el tema que le llevó a alcanzar la fama mundial.
Los padres de Amy Winehouse han hecho públicos los diarios donde la artista plasmaba sus pensamientos más íntimos. El próximo 14 de septiembre la cantante cumpliría 40 años y en homenaje a esa importante fiesta han decidido compartir sus escritos que se saldrán el 29 de agosto bajo el título de In her words.
"La alegría de leer el trabajo de Amy siempre alivia la sensación de devastación por perderla", han declarado Janis y Mitch, los padres de la cantante. "El mundo vio un huracán de talento, pero en la tormenta perdimos a nuestra preciosa hija", ha explicado su madre.
El 23 de julio de 2011, tan solo 5 días más tarde de su último concierto en Belgrado, Amy Winehouse falleció con tan solo 27 años de edad y una carrera como artista que recién había comenzado. Fue el guardaespaldas de la artista quien la encontró junto a tres botellas de vodka sin vida en su casa de Camden Town. La razón de su muerte fue la gran ingesta muy alta de alcohol que el cuerpo de la cantante no pudo resistir.
En una entrevista para el medio The Telegraph, los padres de Amy Winehouse han explicado por qué han decidido dar este importante paso y también han hablado sobre cómo era su hija.
“12 años después de su muerte, mirar hacia atrás en estos dibujos y garabatos todavía nos hace sonreír, al igual que lo hizo Amy. Por supuesto, no podemos blanquear su historia. Sí, era adicta y sí, su vida era caótica. En última instancia, sus adicciones le robaron a ella y a nosotros su vida. Pero esos son tiempos en los que no nos detenemos”, han confesado al medio.
Mitch y Janis han revelado que la cantante solía ir a todos lados con libretitas donde escribía y garabateando todo lo que le ocurría. Llenó decenas de aquellos cuadernos que se quedaba escribiendo hasta por la noche. Raramente compartía el contenido de esos diarios y si lo hacía era de forma puntual como los cumpleaños o el día de la madre donde leía los poemas que redactaba.
Además de escribir sobre sus sentimientos, también recortaba fotos de personas que aparecían en las revistas y le llamaban la atención poniendo pequeñas descripciones a su lado.
Sus sentimientos más íntimos
Amy solía reflexionar sobre todo lo que estaba viviendo y sobre cómo se sentía. “Odio mi temperamento. A veces me carcome tanto que me pongo físicamente violenta con los que amo. Por mucho que diga ‘lo siento’, es algo que nunca podrán olvidar”, confesó en una de sus páginas.
Otro tema que solía incluir eran sus ansias de reconocimiento y la autopercepción que tenía de sí misma. “Estoy contenta de ser diferente. No es como si quisiera ser como todos los demás. Me encanta tener mi propio estilo individual. Me encanta ser ruidosa y hablar con la gente. Es como soy”, escribió en su diario.
“Sobre todo tengo el sueño de ser muy famosa, de trabajar en el escenario. Es una ambición de toda la vida. Quiero que la gente escuche mi voz y olvide sus problemas durante cinco minutos... Quiero que me recuerden por ser... simplemente yo” , puso en otra parte.
Como no podía faltar, Amy también le dedicó un espacio a reflexionar sobre el amor. “A veces me pregunto si hay alguien, algún tipo por ahí que esté tan loco como yo. ¿Un buen chico con cabello oscuro, que usa gafas para leer y es un verdadero chico indie? Piercings opcionales, ¡preferiblemente con acento escocés o irlandés!”, era su definición del chico ideal. “¿Y por qué todos los amigos de mi hermano encajan en esta descripción, pero soy demasiado joven para hacer algo al respecto?”, se abría sin miedo.
Blake Fielder-Civil fue el gran amor de Amy y la pareja con la que más se la pudo ver. Tuvieron una relación tormentosa pero intensa y siempre rodeada de un ambiente marcado por las drogas y el alcohol . Al mes de conocerse, se tatuaron el nombre el uno del otro y estuvieron casados dos años, de 2007 a 2009. Cuando Amy Murió, Blake estaba en la cárcel por haber participado en un robo a mano armada.
Cómo era Amy a ojos de sus padres
“Amy llegó al mundo el 14 de septiembre de 1983. Tenía cuatro días de retraso y siempre bromeábamos diciendo que Amy llegaba tarde a todo, incluso a su propio nacimiento”, la ha descrito su madre. “Podía ser adorable y encantadora, pero si no era feliz, todos lo sabían. ‘¡Cállate, Amy!’ fue probablemente la frase más escuchada en nuestra casa. Ya estuviera feliz o triste, a Amy le encantaba ser el centro de atención”, continuaba explicando.
“Desde el principio, nos dimos cuenta de que la escuela probablemente nunca la iba a satisfacer. ‘Estoy aburrida’, repetía a menudo”, afirmaban sobre la infancia de su hija. “Los profesores nos decían que era brillante y capaz, pero siempre había un ‘pero’. Pero... no podía estarse quieta o se portaba mal en clase. En cambio, Amy devoraba películas, musicales, novelas, poesía y música”, ha recordado.
“Podía recitar letras y cantar melodías después de escuchar una canción, tal vez solo una o dos veces. En la casa de su abuela Cynthia estuvo rodeada de jazz: desde Frank Sinatra hasta Ella Fitzgerald. Y en casa interpretaba canciones de Mary Poppins o himnos judíos”, han asegurado sus padres.
Una libreta para componer
Los diarios de Amy también fueron el sitio donde la artista comenzaba a componer. Mitch recordaba que en varias oraciones cuando discutía con su hija esta se iba en medio de la conversación. “Papá, lo siento. Espera un minuto. Solo tengo que escribir esto”, le decía a su padre antes de liberarlo todo sobre el papel.
Rehab, fue una de las canciones más importantes de su carrera y su origen está en los diarios de Amy. “Fue escrita tras una conversación con Mitch, probablemente garabateada en un cuaderno. Había llegado a su casa con sus entonces managers, que estaban preocupados por su forma de beber y querían llevarla a un centro de rehabilitación. ‘No quiero ir, papá. No tengo 90 días”, le dijo a Mitch. Luego esa conversación acabaría inspirando el tema”, ha afirmado su madre.
“Varios años después, esa conversación se filtró a través de la lente creativa de Amy, se cortó y se reorganizó para convertirse en un éxito número uno”, continuaba narrando. Y efectivamente, Rehab incluía el siguiente verso: "Ellos tratan de que vaya a rehabilitación, pero yo les he dicho que no, no y no", continuaban.
“No sabemos con certeza si componer se convirtió o no en una catarsis para Amy, pero ciertamente fue un proceso creativo al que volvió una y otra vez en sus periodos más felices, así como en sus momentos más oscuros de adicción”, ha terminado explicando.