Qué se sabe del complicado estado de salud de Charlene de Mónaco
La princesa Charlene de Mónaco ha suspendido su asistencia a los actos públicos de la fiesta nacional del Principado, una noticia que ha despertado la preocupación por su estado de salud. Este verano fue intervenida por una complicada infección.
El estado de salud de la princesa Charlene de Mónaco, de 43 años, se ha convertido en una incógnita que cada vez preocupa más a la opinión pública. La esposa de Alberto de Mónaco ha suspendido sus apariciones públicas en los actos de la fiesta nacional del Principado, el 19 de noviembre, una cita ineludible para la familia Grimaldi.
"Sus Altezas Serenas han decidido que un período de calma y descanso es necesario para asegurar la mejor recuperación de la princesa Charlene. Habiendo luchado contra la enfermedad durante los últimos meses, la princesa se encuentra en la actualidad convaleciente y continuará haciéndolo durante las próximas semanas", ha comunicado la casa monegasca, que añade que la princesa solo retomará sus compromisos cuando su salud se lo permita.
Intervenida en Sudáfrica de una infección de oídos, nariz y garganta
La princesa tuvo que ser intervenida en Sudáfrica, su país natal, de una grave infección de nariz, oídos y garganta que se originó a raíz de una cirugía dental previa a su visita al país africano el pasado mes de mayo. Durante la intervención, elevaron su seno maxilar, un procedimiento habitual previo a la colocación de un implante.
Meses separada de su familia
La grave infección que sufrió impidió que la princesa pudiese volver a Mónaco y tuviese que ser operada en Sudáfrica, lugar donde también tuvo que pasar el postoperatorio, algo que la mantuvo alejada de su familia durante seis meses. Regresó a Mónaco a principios de noviembre y allí continúa recuperándose junto a su familia, según la institución, "en un lugar secreto".
Alberto de Mónaco y sus hijos, Gabriella y Jaques, de seis años, viajaron a Sudáfrica en agosto para encontrarse con la princesa ya que la infección otorrinonaringóloga le impedía volar, según fuentes oficiales. Su desmejorado aspecto ha despertado gran cantidad de comentarios sobre su recuperación, pero el soberano siempre ha mantenido que la evolución de su esposa es favorable.
Momentos difíciles para la princesa
En una entrevista con Channel 24 el pasado mes de julio, la princesa hablaba sobre lo difícil que estaba siendo para ella recuperarse lejos de su familia. Uno de sus peores momentos fue cuando los médicos le dijeron que no podía viajar para reunirse con Alberto de Mónaco por su décimo aniversario de boda. Asegura que si él no habría podido superar este momento "tan doloroso" y lo define como su "roca" y su "fuerza".
"Lo que ha sido extremadamente difícil para mí fue cuando mi equipo médico me indicó que no podía regresar a casa para mi décimo aniversario de boda. Sin su amor (refiriéndose a Alberto) y apoyo no habría podido superar este momento doloroso", afirmó.
Constantes rumores de crisis que el monarca desmintió: "No se ha exiliado"
La ausencia de Charlenne en Mónaco durante tantos meses despertó, una vez más, unos rumores de crisis que se mantienen desde prácticamente el día de su boda. Ante la avalancha de rumores, Alberto de Mónaco, de 63 años, habló con la revista People para desmentir que su matrimonio pasase por un mal momento.
"¡Charlene no se fue de Mónaco exiliada!. No se fue porque estuviera enfadada conmigo o con alguien más. Se fue a Sudáfrica para comprobar el trabajo de su fundación allí y para pasar algo de tiempo con su hermano y sus amigos", aseguraba el pasado mes de septiembre.
"Se suponía que iba a ser una estancia de una semana larga, máximo diez días, y todavía sigue allí a causa de su infección y de todas las complicaciones médicas que han surgido. No se ha exiliado. Ha sido un problema médico que ha necesitado tratamiento, simplemente", zanjó.