Sergio Peris-Mencheta vuelve a España y anuncia que ha superado la leucemia: "La enfermedad ha desaparecido"
El actor, que ha vivido el peor año de su vida este 2024, ha regresado a Madrid después de pasar algo más de 180 días en California, donde se sometió a un trasplante de médula ósea para tratar la leucemia que padece.
El gran cambio físico del actor Sergio Peris-Mencheta por la leucemia que padece
Sergio Peris-Mencheta afronta el 2025 con optimismo. El actor ha vuelto a Madrid después de someterse a un trasplante de médula en el Hospital City of Hope Medical Center, en California.
La intervención fue un éxito, pero las secuelas físicas del postoperatorio hicieron mella en su salud. Le costaba salivar -algo que continúa a día de hoy-, tuvo llagas en la boca, diarrea, dolor de huesos, de cabeza... Y estuvo seis días con alimentación por vía intravenosa. Unos detalles que compartió a través de sus redes sociales, que se han convertido en una vía de escape y desahogo en los malos momentos de la enfermedad. Desde que le diagnosticaron leucemia, Peris-Mencheta ha afrontado el tratamiento con estoicismo, pero también miedo e incertidumbre.
Fue su hermano Yoyo el que le donó las células madre que le están devolviendo, poco a poco, la vitalidad. "Preparándome... Las células madre de Yonyon están a punto de aterrizar desde Madrid... Y en unas horas, estaremos juntos como uno solo. Gracias, hermanito. Gracias madre naturaleza. Gracias vida", decía hace meses.
Ahora, el actor ha regresado a Madrid para continuar con su rehabilitación y pasar las Navidades con sus seres queridos. Recién aterrizado después de cruzar el charco, Peris-Mencheta concedía su primera entrevista con Mara Torres en El Faro.
Allí ha compartido la buena noticia que muchos esperaban: "Por dentro estoy bien. Los resultados son buenos. La enfermedad ha desaparecido y las analíticas son buenas", celebraba.
Sin embargo, continúa con mucha medicación. "Ahora estoy padeciendo, después del trasplante, como todos los trasplantados, pues que las células de mi hermano no reconocen la casa en la que están, aunque la casa se parece mucho, porque somos como casi gemelos de sangre, no terminan los glóbulos blancos de reconocer el lugar y por eso atacan, porque son la policía del cuerpo".
Para que poco a poco su sistema inmune se asiente, Mencheta continúa con una medicación específica. "Yo voy con una medicación, que les llamo los diplomáticos, y los están entrenando para que no ataquen".