UNA VIDA LUCHANDO

Los trastornos mentales de Selena Gomez: bipolaridad, depresión, ansiedad y constantes críticas por su peso

La cantante estrena el próximo 4 de noviembre el documental My Mind and Me, donde Selena Gomez hace una mirada hacia su interior para mostrar al mundo los trastornos mentales que la acompañan en su día a día. Un repaso de los últimos seis años de su vida con el que pretende normalizar el convivir con diferentes trastornos mentales.

Selena Gomez
Selena Gomez | Getty Images

Europa FM

Madrid01/11/2022 08:34

Selena Gomez ha abierto las puertas de su mundo interior a las cámaras de televisión. Durante seis años, un equipo de rodaje la ha acompañado en algunos de los momentos más importantes de su carrera y su vida personal, que ha pasado por romances, rupturas e importantes problemas de salud, como el trasplante de riñón al que tuvo que someterse en 2017 a consecuencia del lupus que padece desde 2014, cuando recibió quimioterapia.

El resultado se verá en My Mind and Me (Mi mente y yo), el documental dirigido por Alek Keshisian que Apple TV+ estrena el próximo 4 de noviembre. Desde la plataforma lo describen como un viaje "crudo e íntimo" desde el éxito hacia el abismo, un camino en el que Selena Gomez ha tenido que sortear numerosas dificultades.

"Mi mente y yo a veces no nos llevamos bien y se hace difícil respirar... Pero no cambiaría mi vida", escribió la artista junto a un pequeño adelanto del documental.

Activista de la salud mental y referente

Hace ya años que Selena Gomez se ha convertido en una activista de la salud mental. Empezó a sumergirse e interesarse en el mundo de los trastornos mentales y los cuidados cuando ella misma empezó a padecerlos. Rare Impact Found es el nombre de la fundación asociada a su firma de belleza a través de la cual recauda fondos para destinar a programas que eduquen a los jóvenes en psicología.

También creó Wondermind, una plataforma en la que encontrar contenido en el que el público pueda refugiarse cuando se encuentra en medio de una crisis. Se nutre de experiencias e información científica para crear un "ecosistema que democratiza y desestigma la salud mental", tal y como rezan en sus redes sociales.

Pero no solo ha puesto en marcha plataformas y movimientos. Sus testimonios personales a lo largo de los años se han convertido en el mejor ejemplo de superación. Gomez, que pasó de ser una estrella Disney a una cantante de éxito y reconocida actriz, es el espejo en el que se miran muchas niñas y niños. Y qué mejor ejemplo que el de naturalizar los problemas que se escapan del control de cada uno y hablar de ellos sin pena ni culpa.

Porque domesticar la mente se antoja difícil cuando esta se convierte en tu peor enemigo. Luchar contra los estigmas de la salud mental es tan necesario como tratar cada caso. Su motor para seguir adelante ha sido precisamente la ayuda que puede prestar a los demás. Convertirse en un referente la ha impulsado para luchar tanto por sí misma como por los demás.

"Mi lupus, mi trasplante de riñón, la quimioterapia, tener una enfermedad mental, pasar por desamores muy públicos... Todas estas cosas deberían haberme derribado. Cada vez que pasaba por algo, me decía: '¿Qué más? ¿Con qué más voy a tener que lidiar? Vas a ayudar a la gente'. Eso es realmente lo que me hizo seguir adelante. Podría haber habido un momento en el que no fuera lo suficientemente fuerte y hubiera hecho algo que me hiciera daño", contó a Elle.

Los testimonios de Selena Gomez sobre sus problemas mentales

La bipolaridad y la adicción a las redes

Fue en los momentos más complicados de la pandemia cuando Selena Gomez contó en el programa de entrevistas que Miley Cyrus puso en marcha desde su propia casa que los médicos le habían diagnosticado un trastorno bipolar.

Durante años había intentado encontrar una explicación a sus emociones y por fin dieron con un diagnóstico sobre el que empezar a trabajar. "Fui a uno de los mejores psiquiátricos, McLean Hospital (Massachusetts, Estados Unidos), y me di cuenta de que, después de años de pasar por muchas cosas diferentes, esto es un trastorno bipolar", aseguró.

Ambas artistas recalcaron en aquel momento la importancia de informarse y hacer caso a los profesionales de la salud mental.

Meses más tarde, en una charla con la revista Elle, Gomez añadía que haber recibido aquella valoración había sido un alivio. "Me quité un peso de encima cuando lo descubrí. Respiré hondo y dije: 'Está bien, esto explica muchas cosas", dijo sobre sí misma.

Asegura que apartarse de las redes sociales en aquel momento de vulnerabilidad ha sido una de las mejores decisiones que pudo tomar. Desinstaló las aplicaciones de su teléfono móvil para evitar tentaciones. "He pasado años de mi vida tratando de parecerme a otras personas. Veía una imagen y decía: 'Dios mío, ¿por qué no me veo así? Nada de eso era bueno para mi", contó después de confesar que era capaz de pasar horas y horas repasando los perfiles de otras personas.

Depresión, ansiedad y varios ingresos psiquiátricos

Selena Gomez tiene 30 años y lleva trabajando en la música, el cine y la televisión desde los 15. Esto supone haber permanecido la mitad de su vida en el escrutinio público extremo, una exposición con la que no es fácil lidiar. La cantante ha tenido que recurrir al ingreso hospitalario en más de una ocasión para tratar sus crisis emocionales.

La primera vez que internó en un centro psiquiátrico fue en el año 2014. Por aquel entonces, su tormentosa relación con Justin Bieber atravesaba momentos complicados. La sombra de la infidelidad hizo mella en el estado anímico de la cantante, que tuvo que cancelar algunos shows de su gira Stars Dance e ingresar en una clínica de Arizona.

Selena Gomez en 2014
Selena Gomez en 2014 | Getty

"Después de años de poner mi trabajo como prioridad máxima, necesito pasar un tiempo ocupándome de mí misma para ser la mejor persona posible", dijo la artista. Aunque su entorno cercano lo desmintió, surgieron muchas informaciones sobre el abusos de sustancias que la artista nunca confirmó.

Dos años después, en 2016, la cantante desvelaba que aquel ingreso había tenido mucho más que ver con el lupus que acababan de diagnosticarle que con los problemas de su relación con Bieber. "He descubierto que la ansiedad, los ataques de pánico y la depresión pueden ser efectos secundarios de lupus", explicó la cantante en una nota de prensa publicada por la revista People.

En una charal con GQ fue un poco más drástica a la hora de recalcar que al público le importaban más sus más sus problemas personales con Justin Bieber que su verdadero estado de salud a raíz de su estancia en la clínica. "Mi pasado parece que es mucho más fascinante para la gente que mi futuro, lo cual me deja sin palabras. No me apetece nada sentarme y hablar sobre cómo fue la experiencia. ¿Fue divertido? No. ¿Es divertido padecerlo? No", sentenció.

Selena Gomez en 2016
Selena Gomez en 2016 | Getty

En 2018 la cantante tuvo que volver a internarse en un centro psiquiátrico por una crisis emocional derivada de sus problemas de salud. La artista tuvo que ingresar en el hospital por un bajo nivel de leucocitos -provocado por el trasplante de riñón- y aunque Gomez pidió el alta voluntaria, los médicos se la denegaron. Fue entonces cuando desarrolló un nivel de nerviosismo y estrés que la llevó a quitarse las vías por la fuerza.

A raíz de este incidente, la cantante pasó dos meses en un centro psiquiátrico para someterse a una terapia dialéctica conductual centrada en las habilidades psicosociales. En cuanto terminó el ingreso salió de viaje a la nieve con sus amigas más íntimas, unas fotos que despertaron la ternura de sus fans, que mucho la habían echado de menos.

Cambios de peso a consecuencia de los tratamientos

Aunque nunca ha confirmado que haya padecido anorexia o bulimia durante alguna época concreta de su vida, numerosos seguidores apuntan a que la artista haya podido sufrir algún trastorno de su conducta alimentaria.

Los cambios de peso derivados de sus problemas de salud, el exigente escrutinio público y la eterna comparativa con otras personas podrían haber sido desencadenantes. Además, en numerosas ocasiones ha recibido críticas sobre su cuerpo, unos comentarios a los que ha plantado cara en más de una ocasión.

Selena Gomez
Selena Gomez | Getty

"Sinceramente, no me importa mi peso porque la gente va a hablar de él de cualquier forma: 'Eres muy pequeña', 'Estás muy grande', 'Eso no te queda bien', 'blah blah blah', perra, soy perfecta tal como soy. ¿Cuál es la moraleja de la historia? Adiós", dijo la artista en un vídeo que publicó en TikTok.

Además, en su caso, los cambios repentinos de peso son consecuencia directa del tratamiento al que tiene que someterse de por vida para tratar su lupus. "Son medicamentos que debo tomar por el resto de mi vida y realmente depende de cada mes (la subida o bajada de peso)", dijo en el podcast Giving Back Generation.