Travis Barker, marido de Kourtney Kardashian, se pronuncia tras casi perder la vida
Travis Barker ha reaparecido en redes sociales para hablar sobre qué le ocurrió para tener que ser hospitalizado de urgencia y los duros momentos que ha pasado pensando incluso que podría perder la vida.
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Hace unos días Travis Barker vivió unos complicados momentos al tener que ser trasladado de un hospital a otro en ambulancia debido a una urgencia médica. Mientras esto ocurría, el músico preocupó a sus seguidores al tuitear "Dios, sálvame". Una petición a la que se sumaba su hija, Alabama Barker, pidiendo oraciones para su padre.
Por su parte, Kourtney Kardashian, con quien se ha casado recientemente, no se separó de su marido en ningún momento, acompañándolo incluso en la ambulancia.
Días más tarde, el portal TMZ pudo saber que el batería de Blink 182 había sido hospitalizado por una pancreatitis, una inflamación que puede provocar incluso la muerte si no se consigue controlar.
Una semana después de lo ocurrido, Travis se ha pronunciado a través de su perfil de Instagram con un comunicado: "Fui a hacerme una endoscopia el lunes y me sentía bien. Pero después de cenar, empecé a sentir un dolor agudo por el que tuve que estar hospitalizado desde entonces".
"Durante la endoscopia, me retiraron un pólipo muy pequeño en una zona muy sensible, normalmente hecho por especialistas, quienes desafortunadamente dañaron un tubo de drenaje pancreático. Esto derivó en una pancreatitis muy grave", ha continuado explicando, dejando caer que podría emprender acciones legales contra los profesionales que le asistieron.
Por último, el músico confiesa estar muy agradecido porque con el tratamiento intensivo que le han puesto durante su hospitalización está mucho mejor.
La reflexión de Kourtney Kardashian sobre lo ocurrido con su marido
Kourtney Kardashian también ha querido pronunciarse a través de redes sociales donde ha hecho una reflexión sobre cómo pueden cambiar las cosas en cuestión de instantes: "Travis y yo fuimos a una endoscopia rutinaria juntos y él terminó con una pancreatitis severa que puso en peligro su vida".
La mayor de las hermanas del clan Kardashian-Jenner ha asegurado que ha ido una semana "aterradora y emotiva" y asegura que la salud es "todo lo que tenemos" y que puede cambiar de repente.
"Doy las gracias a Dios por sanar a mi marido, a todos los que habéis rezado por él y por nosotros", ha continuado, para también dar las gracias a los médicos y enfermeros del hospital Cedars Sinai por haber cuidado de ellos durante su estancia.