Coldplay elige el estudio del guitarrista de Triana para grabar en Tarifa

Cada paso que da Coldplay se convierte en un terremoto de dimensiones épicas, a excepción de los que se llevan a cabo en el más absoluto de los sigilos. Una circunstancia aplicable a su última visita a España en la que, salvo los implicados, nadie se ha enterado de la presencia de Chris Martin, Guy Berryman, Will Champion y Jonny Buckland en nuestro país.

Tal y como informa la periodista Gloria Sánchez-Grande en el diario Europa Sur, la banda británica ha pasado alrededor de dos semanas de trabajo -entre julio y agosto- en Punta Paloma Estudio, el espacio musical que gestiona José María Sagrista, guitarrista del mítico grupo Triana, y su esposa, Encarna Carrasco, en Tarifa.

Se trata de un estudio en el que, como detalla el propio Sagrista, "existe el silencio, la paz y la auténtica naturaleza" y, aunque los miembros de Coldplay decidieron decantarse por una villa, existe la posibilidad de alojarse.

"Para nosotros, esto ha supuesto una alegría enorme después de tantos años de trabajo", ha declarado a Europa Sur. "Somos un estudio bueno y modesto, con una notable trayectoria, pero no somos un mega estudio de una mega empresa, sino una empresa familiar y un tanto artesanal".

Un cambio en la fecha de salida de Coldplay de Punta Paloma impidió la fotografía de recuerdo - “se nos escaparon”-, por lo que no ha quedado registro de su paso por el estudio, aunque todo apunta a que habrían estado trabajando en Moon Music, su nuevo álbum del que ya se conocen canciones como feelslikeimfallinginlove o We Pray.

Además, Sagrista no ha dejado escapar la ocasión para destacar la amabilidad con la que se ha manejado Chris Martin, líder del grupo. “Me pareció un tipo muy amable y cercano”, ha explicado.

A pesar de ser el grupo de mayor relevancia internacional que se ha pasado por este rincón de Tarifa, en Punta Paloma Estudio ha trabajado con artistas de la talla de Kiko Veneno, Reincidentes, Estrella Morente, Chambao, Antonio Orozco, Pastora Soler, El Barrio, El Canijo de Jerez, Israel Fernández o Rosario Flores, quien llegó a alojarse en la parte residencial porque “había paparazzis dando vueltas. Para tangarlos un poco”.