NUEVO DISCO

Barei presenta 'Trece': "Sigo siendo autoexigente, pero no busco tanto la aprobación externa"

La cantante, que en sus seis años de parón ha sido madre de mellizos, vuelve con un disco introspectivo en el que reflexiona sobre sus emociones, que también son las del público, "porque todos sentimos igual". Barei canta por primera vez en castellano, un cambio de idioma con el que suma espontaneidad y honestidad en su regreso a la música.

Barei en Europa FM

Europa FM

Madrid01/03/2025 10:07

Sin miedo al cambio, consciente y transformada a nivel personal y laboral. Barei, que fue disco de oro en 2016 con Say Yay!, la canción con la que representó a España en Eurovisión, estrena Trece, un álbum que llega después de seis años de parón. No ha sido una pausa al uso, ya que ha continuado trabajando en la composición para otros artistas, pero sí retoma una carrera que detuvo cantando en inglés.

Ahora abraza el castellano en unas letras sencillas y personales. "Me apetecía ser honesta con este proyecto, permitirme hablar sin pensar tanto en qué decir o cómo decirlo. Yo no pienso en inglés, pienso en castellano. Sueño en español", cuenta en una entrevista con Europa FM después de asegurar que lo único que le ha generado algo de rechazo es lo que está relacionado con lo superficial: "La parte que conlleva este trabajo de exposición, de eventos, de redes sociales, de estar ahí todo el día pensando en cómo voy, qué me pongo, cómo me pinto, cómo llevo el pelo...".

"Me apetecía ser honesta con este proyecto, permitirme hablar sin pensar tanto en qué decir o cómo decirlo"

La parte creativa es lo que realmente le apetecía, un proceso que realmente ha disfrutado. Ella, que se reconoce autoexigente y controladora tanto en su vida personal y laboral, ha sabido delegar por primera vez en un equipo en el que confía plenamente. También se ha liberado del apego del resultado. "Antes vivía con mucha ansiedad por saber cuánta gente la iba a ver, si iba a entrar en radio o no, cuál era la fórmula perfecta, qué se llevaba, qué no se llevaba...", rememora de esa antigua Bárbara de la que ya solo quedan recuerdos... Y un pelín de autoexigencia. Porque aunque ha mejorado esa parte de sí misma, que sigue buscando sin descanso la perfección en su trabajo, ahora lo hace más relajada y con la experiencia que le brinda el paso del tiempo.

"Sigo siendo autoexigente conmigo misma, pero no busco tanto la aprobación externa. Con este álbum es la primera vez que me he quitado presión. O sea, que no ha sido una autoexigencia destructiva", explica antes de reconocer que, a pesar de que está en su personalidad, no le gusta ser controladora. Adoptó este rol de inspectora hace tiempo, cuando las personas que la rodeaban no seguían su mismo camino. "Me hubiera gustado saber hacer equipo antes. Hay una reflexión que tengo siempre, un discurso que tengo interno, que no sé si es para excusarme o porque realmente es así, que es que no sé si nunca he podido tener la capacidad de delegar y de soltar el control porque yo soy así, —porque soy muy controladora y eso tampoco me gusta nada— , o si esto parte de que en mis equipos ha habido personas en las que no he podido confiar". No se arrepiente de las decisiones tomadas, porque gracias a ellas está donde está hoy, un lugar de calma y consciencia.

"Con este álbum es la primera vez que me he quitado presión. O sea, que no ha sido una autoexigencia destructiva"

Trece, que es el cuarto LP de su carrera, llega para plasmar en canciones tanto sus emociones como las de todo el mundo, "porque todos sentimos igual". Por ejemplo, en Cuéntame qué te pasa, trata de empatizar tanto con el que sufre un problema de salud mental como con el que está intentando ayudar desde fuera. La música es precisamente uno de los canales que a ella le han ayudado a transitar. "Ojalá muchas personas pueda mirarse a sí mismas a través de este álbum. Es como 'pasen y mírense en el espejo' porque en realidad creo que todos somos espejos de todos y al final lo que te pasa a ti me ha pasado a mí", reflexiona.

Este lanzamiento llega en plena resaca del Benidorm Fest, la preselección eurovisiva que alzó a Melody como representante de España en Eurovisión 2025 con el tema Esa Diva. "Me alegro mucho porque con lo que ha currado en su carrera, en toda su vida y el esfuerzo que ha tenido siempre también como artista independiente, como yo... Empatizo mucho con ella en ese sentido, como artista independiente, así que me alegro infinito", celebra. De su paso por Eurovisión, ella se queda con los buenos recuerdos y el aprendizaje que le sirvió para desarrollarse a posteriori. "Hubo momentos de mucha presión, de llorar mucho, de tener un puesto 22 y sentirme fatal, pero el cómputo total, doy las gracias por haber podido vivir esa experiencia".