ESTRENO

Fergie, prisionera de sus propios demonios en el videoclip de 'A Little Work'

Con una camisa de fuerza en un manicomio, redimiéndose en una iglesia y saliendo de ella con su hijo (real) en brazos. Así aparece Fergie en el videoclip de 'A Little Work', en el que encuentra la salvación a sus demonios internos.

Fergie en el videoclip de 'A Little Work'
Fergie en el videoclip de 'A Little Work' | Youtube

Europa FM

Madrid02/10/2017 19:08

A medio camino entre documental y videoclip, Fergie escenifica en 'A Little Work' una fasess de su vida que parece que han hecho mella en la artista.

'Double Duchess', el disco del que forma parte este tema, es su segundo trabajo sin The Black Eyed Peas. 'The Dutchess', su debut en solitario, tiene ya más de diez años, así que ya iba siendo hora de que Fergie nos contase algo nuevo. Y vaya si lo ha hecho....

Encerrada en un manicomio y con una camisa de fuerza, Fergie alude a una supuesta enfermedad mental de la que no ha sido fácil salir. De hecho, puede que tenga algo que ver con una adicción a la metaanfetamienta de hace muchos años.

"Mi abuelo, siempre pensé que era mi ángel de la guarda. Pensé que me estaba guiando, diciéndome dónde ir, en la buena dirección. 'Tienes que honrar esa parte de ti misma y dejar que vuele, que crezca'. Esa es la batalla que luchas en tu mente", narra la cantante.

Intercalando imágenes de una Fergie de niña, la cantante intenta recordar cómo era su vida antes de que apareciesen esos "demonios". También se mete en la piel de una camarera a la que agobian las facturas, con un niño que depende de ella.

Es en una iglesia abandonada y pintarrajeada donde Fergie encuentra la salvación y por fin entiende el mensaje de su abuelo: "Este demonio que estaba allí, de repente sentí como si se hubiera levantando, y era casi como caminar a la luz. Y me di cuenta de que necesitaba honrarme a mi misma. Cuando honro esa parte de mí que es esa magia, es cuando estoy en ese lugar que puedo llamar felicidad", asegura Fergie.

Al final vemos cómo la cantante sale del templo con su hijo en brazos. Sí, hablamos del pequeño Axl Jack Duhamel, hijo de la cantante y su ex marido Josh Duhamel.

El videoclip, dirigido por Jonas Åkerlund,cuida mucho la estética, el vestuario y los colores, algo que (inevitablemente) nos recuerda a los cortometrajes de Beyoncé. Aun así, un tema tan delicado como una enfermedad mental, no debería tratarse con esta... ¿frivolidad?.