Iván Ferreiro: "Si entro a un bar y el Dj pone mis canciones, me voy"
No está saturado de Turnedo, su gran himno, pero tampoco le hace mucha gracia ir de garitos y escucharse a sí mismo. Iván Ferreiro, creador de éxitos que llevan arrollando al público más de 20 años, charla con Europa FM antes de subirse al escenario del MadBlue Festival este sábado.
Ir a ver en directo a Iván Ferreiro implica sumergirse en un mundo de complejidades, ajenas y propias. En los discos suena bien, pero su voz nasal y sus sintetizadores adquieren profundidad sobre el escenario. El gallego siempre quiso tocar teclas, pero su periplo en los 90 junto a Los Piratas le convirtió en un cantautor que ahora coquetea con moduladores y máquinas de todo tipo. Para muestra, su último disco, Trinchera Pop, con pulso electrónico y arreglos más allá de lo común.
Junto a su hermano Amaro es creador del ya inconfundible sello Ferreiro, un concepto que abrazan y admiran todos los artistas con los que ha colaborado. Desde su incondicional amigo Leiva hasta Juancho Marqués, pasando por Sidercars, Coque Malla o Love of Lesbian.
Canciones compuestas desde el cerebro y tocadas con el corazón. El equilibrio es imposible, ineludible en sus conciertos, remueve por dentro y habla de la rendición, del error ―o acierto― que supone volver a caer, dejarse llevar.
En los acústicos, como este set del MadBlue, suele pedir silencio, pero por norma general no le molesta que la gente se deje la voz al cantar clásicos como Años 80. "Me parece un regalo, el éxito verdadero es cuando haces una canción y todo el mundo la canta. Es a lo que aspiramos todos", cuenta. Tampoco está saturado de Turnedo, pero reconoce que evita escucharse a sí mismo cuando no está trabajando: "Si entro en un bar y el Dj pone mi canción, mi rollo natural es irme del bar".
Un artista de carácter afable, entre risueño y tosco, que se vuelve entrañable cuando se presta al juego de las tontadas virales. Le sometimos a un test para calibrar cuánto sabe de sí mismo y, aunque esté a medio camino entre el aprobado y el suspenso, ¿cómo vamos a sancionar al compositor de SPNB?