Lori Meyers celebran sus 20 años en la música con un baño de multitudes
El grupo granadino tenía una importante cita en el WiZink Center de Madrid, a la que no quisieron faltar cerca de 12.000 almas enamoradas de su música y sus letras, que repasaron durante más de dos horas todos los éxitos de la banda.
Lori Meyers celebraban sus 20 años en la música, y lo hicieron por todo lo alto en un concierto multitudinario en el WiZink Center, donde pudimos disfrutar de sus temas más emblemáticos, acompañados por una singular puesta en escena, que además de pantallas gigantes y espectaculares visuales, incluía una cuidada coreografía con bailarines, versiones en acústico con aire flamenco para acercarnos a sus raíces, y sorpresas caídas del cielo en forma de globos de colores para celebrar una longevidad discreta pero constante en el escenario pop-rock nacional de corte alternativo.
El concierto comenzó con 'Vértigo', con el grupo acompañado por varios bailarines semiocultos tras unas pantallas que daban una sensación poco inaugural a un evento que no solo celebra los 20 años de los "granaínos" en la música, sino que era el preámbulo a un año alejados de los escenarios, donde se van a centrar en su próximo álbum.
Poco a poco aumentó el ritmo del concierto, y aunque la voz de Noni quedaba emboscada en la acústica, el público siguió fiel a los de Loja, que no escatimaron en recursos visuales, sin prodigarse en la prosa.
'Tokio ya no nos quiere' tiñó de rojo el WiZink, poiendo a saltar al público. Entre las curiosidades del concierto, los Lori Meyers aprovecharon que estaban en Madrid para versionar el tema 'Esperando nada' de Antonio Vega, pero también se situaron delante del escenario, guitarra española en mano y cajón flamenco, para interpretar 'Saudade' y 'Rumba en atmósfera cero' rescatando "sus raíces".
Las 12.000 almas congregadas en el WiZink explotaron con los primeros acordes de 'Alta fidelidad', sin duda el tema más reconocible de sus 20 años de historia, que repasaron cuando se cumplía una hora y media de concierto, con un vídeo en forma de cómic, en el que mostraron fotos de ellos y momentos que consideraron importantes de su infancia y su historia más reciente.
'Emborracharme' puso un primer punto y final a la cita, aunque los Lori Meyers habían ido a darlo todo, y no escatimaron en bises hasta completar las dos horas y media de autohomenaje sonoro.
Con un año por delante dedicado al que será su próximo álbum de estudio, los de Loja quisieron darse un 'jartón' de público, que les echará de menos este 2019.
¡Muchas felicidades, chicos!