¿Qué fue de Nek, el cantante italiano que se hizo famoso cantando 'Laura no está’?
De San Remo al mundo. La canción que Nek presentó al famoso festival italiano, la célebre Laura no está, le lanzó a la fama en toda Europa y América Latina. Han pasado más de 25 años de aquel éxito y el artista, que sigue siendo una estrella en su país, ha vuelto a San Remo este 2024, aunque embarcado en otro nuevo proyecto musical.
Corría el año 1997 cuando una canción secuestró la identidad de miles de Lauras del mundo. Y aún hoy hay una generación que tararea “Laura no está, Laura se fue / Laura se escapa de mi vida” cada vez que escucha ese nombre.
Aquel tema de Nek —Laura non c'è, en italiano— conquistó sin miramientos Italia desde que fue presentado en el festival de San Remo. Y aunque no ganó —vivió un fenómeno parecido a Nochentera de Vicco—, se convirtió en un éxito mundial alcanzando los primeros puestos de las listas en varios países de Europa y en América Latina.
Además de lo pegadizo de la canción, la voz grave y rasgada del italiano y su intensa mirada azul hicieron las delicias de muchos y lo convirtieron en uno de los cantantes de moda de aquellos años. Volvió a conquistar las listas con Tan solo tú junto a Laura Pausini; Al menos ahora; Para ti sería o Nos vemos en el camino, en colaboración con El sueño de Morfeo, que lo confirmaron como una estrella del pop europeo. Pero su efecto se fue diluyendo en España.
San Remo, su escenario preferido
Cuando Nek presentó en 1997 su gran éxito en San Remo no era la primera vez que pisaba el escenario de ese festival. Ni tampoco sería la última. Con solo 21 años, en 1993, debutó en el certamen del que sale la canción italiana que luego irá a Eurovisión y que es plataforma de lanzamiento de numerosos artistas, entre ellos Laura Pausini. Lo hizo con la canción In te, cuya letra fue objeto de cierta polémica pues hablaba sobre el aborto.
Repitió experiencia —por tercera vez— en 2015, 18 años después del estreno de Laura no está. Su canción Fatti avanti amore fue la segunda clasificada del concurso, y también recogió el premio a la Mejor interpretación de una versión por el tema Se telefonando, de la mítica cantante Mina y el Mejor arreglo orquestal por Fatti avanti amore.
Esa tampoco fue su última vez en San Remo. Este mismo año lo ha vuelto a hacer y no se presentó solo. En febrero formó dúo con el cantante Francesco Renga, otro de las voces clásicas en Italia, con el que ha decidido iniciar una nueva etapa profesional y con el que interpretó la canción Pazzo di te. Quedaron en 25º lugar.
Su nuevo proyecto musical
El 8 de septiembre de 2023, los dos famosos cantantes materializaron el proyecto en el que ya llevaban tiempo trabajando y lanzaron el álbum RENGANEK, con el que además celebraban los 30 años de carrera de Nek y los 40, de Renga.
Con el estreno del disco empezaron una gira con la que recorrerán toda Italia hasta el mes de agosto y con la que han agotado entradas en varias ciudades, entre ellas el estadio Arena de Verona.
Su familia y la fe
Además de a su proyecto musical, Nek dedica su tiempo a promover y colaborar con diversas causas solidarias y, sobre todo, a su familia.
Casado desde septiembre de 2006 con Patrizia Vacondio, su exasistente, tienen una hija que nació en septiembre de 2010. Tanto a su mujer como a la pequeña dedica en sus redes numerosas muestras de cariño.
Pero su apacible y feliz día a día se vio interrumpida en 2020 por un accidente que dio un vuelco a su vida y por el que casi pierde la mano.
Ese miedo a no poder volver a coger su guitarra o a no poder hacer música le llevó a escribir un libro, A mani mani (Con las manos desnudas).
“A veces, un solo momento puede cambiarlo todo. Un día soleado es suficiente (…) para trabajar la madera. El accidente es repentino. La sangre, luego el dolor, el miedo, la conmoción. La carrera al hospital. La mano rota. La posibilidad de no recuperar su uso. Pero ¿qué significa perder la funcionalidad de una mano para un músico?”, escribe el cantante en sus páginas.
Un duro momento que superó, en buena medida, por su fe y su devoción por la religión católica.