Qué es un linfoma cerebral, la enfermedad que padece Raphael
El cantante Raphael ha sido diagnosticado con un linfoma cerebral, una rara enfermedad cuyo origen se sitúa en los linfocitos de la sangre y que suele requerir la implicación de varios especialistas en el tratamiento.
Raphael recibe el alta tras ser diagnosticado con linfoma cerebral
Jacobo Martos, hijo de Raphael, se muestra "optimista" ante el diagnóstico del cantante
El cantante Raphael ha recibido el alta médica tras 10 días ingresado en el hospital 12 de Ocutbre de Madrid después de sentir una indisposición durante una de sus actuaciones. Una afección que, tras las pruebas practicadas por parte de los médicos del centro hospitalario, han desemebocado en un diagnóstico de linfoma cerebral con "dos nódulos cerebrales en el hemisferio izquierdo que justifican los síntomas neurológicos que presentó hace unos días".
Tal y como han trasladado el equipo médico que ha atendido al de Linares y su agencia de representación, "durante su ingreso en este Hospital se ha iniciado tratamiento específico para esta patología que continuará de forma ambulatoria". Una circunstancia que ha obligado al artista a cancelar sus compromisos musicales de los próximos meses en Latinoamérica "por prescipción médica".
Además, ha sido su propio hijo Jacobo quien se ha mostrado "optimista" ante el problema de salud de su padre: "Hay diagnóstico y hay tratamiento, que era lo fundamental. Ya, pues optimismo y estas cosas. Luego él es una persona muy fuerte, el tratamiento seguirá en casa con visitas periódicas al hospital".
Jacobo también ha explicado que Raphael se encuentra "muy animado" ante la situación: "Sí, es que él está muy animado. Quiero decir, tiene lo que tiene, pero es algo que esperamos que el tratamiento vaya muy bien, y él está muy contento, la verdad".
Qué es el linfoma cerebral
El linfoma cerebral es un tipo de tumor cerebral poco frecuente originado a partir de los linfocitos, un tipo de glóbulo blanco que forma parte del sistema inmunológico, cuya afección se dirige al sistema nervioso central.
A diferencia de otros tipos de linfomas, que afectan los ganglios linfáticos o los órganos, este genera daños directamente en el cerebro y, en determinadas ocasiones, a la médula espinal. Se trata de una clase de linfoma que se puede desarrollar como primario, si se origina directamente en el cerebr, o secundario, en caso de que se disemine desde otras zonas del cuerpo.
Entre los síntomas más comunes de este tipo de linfoma se encuentran los trastornos del habla, problemas de visión, pérdida de fuerza en las extremidades o cambios de comportamiento o personalidad.
A la hora de afrontar los tratamientos para el linfoma cerebral, es necesaria llevar a cabo un enfoque multidisciplinario, con los pacientes atendidos, en muchas ocasiones, por equipos con oncólogos, neurólogos, radioterapeutas y otros especialistas. Es este equipo el encargado de establecer el régimen de quimioterapia y radioterapia que recibirá el paciente, al ser uno de los tratamientos habituales para paliar esta enfermedad.