10 errores comunes que cometemos cuando paseamos a nuestros perros
Paseos muy largos o demasiado cortos, paseos siempre por el mismo entorno, paseos sin posibilidad de movimientos extras... Si tu perro se identifica con alguna de esas situaciones, deberías cambiar la rutina de vuestras salidas.
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A diferencia de otros animales de compañía, los perros deben salir todos los días a la calle, no solo para hacer sus necesidades, sino también para socializar y hacer ejercicio. El paseo es una parte fundamental de sus vidas y hay diversas formas de hacerlo correctamente, como explica la educadora canina Patricia Guerrero.
Lo importante, para que nuestros compañeros caninos puedan tener la mejor experiencia fuera de casa, es evitar cometer cualquiera de estos 10 errores.
1. Hacer un único tipo de paseo al día.
Los perros salen a la calle para hacer sus necesidades, pero también para socializar con otros perros y para hacer ejercicio. Es importante que en las diferentes salidas diarias se cubran estas necesidades.
2. Pasearlos siempre en el mismo entorno.
Está bien mantener unos hábitos de pasear a nuestro perro a las mismas horas y normalmente por los mismos lugares, pero también es importante que puedan conocer otros sitios. Es recomendable hacer otro tipo de rutas y, si vivimos en la ciudad, llevarlos al campo de vez en cuando.
3. Utilizar siempre el mismo tipo de collar.
De la misma forma que existen diferentes tipos de paseos, también debemos adecuar el sistema de seguridad. Por ejemplo, se recomienda usar arnés para paseos deportivos por la ciudad o el campo.
4. Pretender que vaya todo el rato a nuestro lado.
Está bien que nuestro perro sepa ir a nuestro ritmo y, si es necesario, que camine a nuestro lado. Pero esto no tiene por qué ser así durante todo el paseo. También podemos dejar que vayan por delante mientras no tiren de la correa para que se sientan más a gusto y seguros.
5. No permitirles olisquear.
El olfato de los perros es su mayor fuente de estímulos. Si vamos andando por la calle y se para a olisquear, hay que dejar que lo haga.
6. Excesivo tiempo de juego.
Un error común es pensar que estar dos horas en el pipican es bueno para nuestros perros. El tiempo de juego depende del tipo del animal, en cualquier caso no se recomienda llevarlo inmediatamente a casa después de estas actividades. La última parte del paseo debería ser algo calmado.
7. Jugar mal a la pelota.
Si a nuestro perro le gusta jugar con la pelota, es bueno que les estimulemos con este juego, pero hay que asegurarse que no sea siempre lanzarla, que la atrape y nos la devuelva. Es bueno introducir otras variantes, como pedirle que haga algún truco antes de lanzarla o simplemente esconderla y que la busque.
8. No dejarlos correr.
Los perros necesitan ejercitarse, no solo andando, sino también corriendo y jugando. Si tu perro no te obedece como para soltarlo en un espacio abierto, llévalo a un pipican al menos una vez al día.
9. Llevarlos sueltos por la calle.
De la misma forma, no debes sobrevalorar a tu perro por muy bien adiestrado que creas tenerlo. Siempre puede ocurrir algo que los distraiga y, si los llevas sueltos por la calle, que ponga en peligro su vida. Tampoco deberías hacerlo por respeto al resto de personas.
10. No recoger sus excrementos.
Y por último, también por civismo. Además de ser antihigiénico, no recoger las heces de nuestros perros contribuye a crear una actitud social negativa hacia ellos.