El anticonceptivo "más seguro del mundo", 'Essure', se ha convertido en la pesadilla de muchas mujeres
La utilización del anticonceptivo Essure, se aprobó en Europa en el año 2001. Años después, son más de 1.000 mujeres las que comparten en sus redes sociales sus efectos secundarios.
Essure es un anticonceptivo que funciona sin hormonas, con la implantación de un muelle de níquel en las trompas de falopio. Lo que consigue este mecanismo es bloquear el paso de los espermatozoides.
Sin embargo, en España son ya 240 mujeres las que han denunciado la utilización de este método anticonceptivo, que actualmente comercializa la farmacéutica Bayer.
Muchas mujeres optaron por este nuevo método, ya que no utiliza hormonas y es una alternativa no quirúrgica mucho más barata, en principio, que la ligadura de trompas.
Las usuarias de este método no imaginaron nunca que les podría provocar tantos efectos secundarios: picores vaginales, reglas irregulares, dolores de cabeza, cefaleas, inflamaciones, hemorragias vaginales, dolores de espalda, lumbares, reacciones alérgicas, ansiedad, cansancio, incluso ha llegado a perforar las trompas de falopio y órganos cercanos.
Además de todos los efectos secundarios, ya se han registrado más de 600 embarazos no deseados por la utilización de este método anticonceptivo.
El escándalo comenzó en Estados Unidos y fue tan polémico, que las mujeres que usan este tratamiento han conseguido forzar una audiencia ante la Food and Drugs Administration (FDA) para revisar el permiso de este anticonceptivo.
El equivalente a esta organización en España, es el Ministerio de Sanidad y Consumo, que tras revisar los testimonios de las mujeres afectadas, escuchar opiniones de expertos y de los abogados Bayer, han decidido no prohibir el uso de Essure, aunque sí endurecerán las condiciones para su aplicación.
Según informa la revista médica británica BMJ, una nueva investigación ha encontrado diez veces más posibilidades de que las mujeres que han utilizado este método corran el riesgo de necesitar cirugía frente a las que se han sometido a una esterilizaciñon convencional.
Algunas de las afectadas aseguran que la Seguridad Social no informa como debería sobre los riesgos que supone la implantación del Essure; se pide firmar el consentimiento pero no se comunican las consecuencias a las que se enfrentan las mujeres si no da resultado.
En España se ha creado un grupo de Facebook, donde se recogen las experiencias contadas por las mujeres que padecen los efectos secundarios, en el que ya participan más de 1.000 personas.
¡Qué miedo chicas!