Ocho errores que no debes cometer si quieres que tu casa no sea un horno durante la ola de calor
Comienza la ola de calor en prácticamente toda España y pensarás que ya no puedes aguantar más grados. Sí puedes. El truco está en salir lo menos posibles y mantener la casa fresca. Hay muchas formas de hacerlo (incluso si no tienes aire acondicionado) y también hay cosas que puedes dejar de hacer. Estos son ocho errores que no debes cometer si quieres evitar que tu casa sea un horno.
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Se avecinan días de mucho calor en prácticamente toda España. Solo Galicia, Asturias y la zona del litoral cantábrico se libran de la ola de calor que llega este jueves 22 de julio y que según ha avisado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) se prolongará hasta el domingo.
La AEMET alerta de que los próximos días serán muy calurosos y advierte del peligro que suponen las altas temperaturas. Este fin de semana hay que extremar la precaución.
Cuando llega el calor, lo recomendable es salir de casa solo cuando es imprescindible, por eso es primordial que tu hogar sea un lugar fresco.
La mayoría de consejos para lograrlo seguro que los sabes, pero ¿tienes claro lo que no hay que hacer? Porque en esto de mantener la casa a una temperatura agradable es tan importante el saber qué hacer como tener claro los errores que debemos evitar.
Ocho errores que no debes cometer
1. Tener encendidas luces que no necesitas
Las luces emiten calor adicional que hace que tu casa sea aún más cálida, por lo que apagarlas puede ayudar a mantener tu hogar más fresco.
2. Enchufar todos los aparatos electrónicos de casa
Como ocurre con las bombillas, los aparatos electrónicos irradian calor y puede hacer que suba la temperatura de la casa. Es aconsejable que desenchufes el móvil, la televisión y otros dispositivos electrónicos que emitan calor y que no uses habitualmente. Tampoco los cargues por la noche si quieres dormir fresco.
3. Utilizar cualquier sábana sin fijarte en el material
Si tu habitación es caliente usar sábanas de algodón y lino te puede ayudar a que duermas mejor ya que estas telas son transpirables y son mejores para mantenerte fresco.
También es un buen truco meter las sabanas en una bolsa de plástico y en el congelador 10 o 15 minutos antes de acostarte para que estén frescas cuando te metas en la cama.
4. Poner alegremente y a cualquier hora el lavavajillas y la lavadora
Una ducha de agua caliente, el lavavajillas o una lavadora producen vapor y este a su vez humedad lo que provoca que la casa esté más caliente.
5. Mantener las ventanas cerradas todo el día
Es necesario ventilar la casa para que no se concentre todo el calor en un mismo espacio. Por las mañanas abre las ventanas y deja las persianas medio bajadas. Cuando el calor empiece a notarse ciérralas y, por la tarde noche, cuando el calor baje, vuélvelas a abrir, así conseguirás que el poco viento que corra entre por tu ventana y refresque algo el ambiente.
6. Dejar las puertas de las habitaciones cerradas
No mantengas las puertas de las habitaciones cerradas, el aire tiene que ir fluyendo por todas las estancias de la casa, si no lo haces así, cuando abras la puerta de la habitación será un horno.
7. Tener las cortinas descorridas
Si abres las cortinas y dejas entrar la luz del sol cuando hace calor fuera aumentará la temperatura de tu hogar. Es mejor dejarlas cerradas durante todo el día para que absorban el calor.
8. No prestarle atención al menú diario
Preparar comidas en el horno puede hacer que tu hogar se caliente. Intenta hacer ensaladas o sándwiches para mantener fresco el entorno.
Otros trucos para que no pases calor en tu casa
- Dúchate antes de acostarte
Darte una ducha fría te va a ayudar a reducir la temperatura corporal y a conciliar mejor el sueño.
- Utiliza ventilador
Si no tienes aire acondicionado, el ventilador eléctrico es la mejor opción.
- Haz tu propio aire acondicionado
Coloca un recipiente lleno de agua helada en frente de un ventilador y enciéndelo. A medida que el hielo se derrite el ventilador recogerá ese aire frío que proviene de la superficie del hielo y creará una brisa fresca muy similar a la del aire acondicionado.
- Convierte tu bolsa de agua caliente en una bolsa de hielo
Introduce una botella de agua en el congelador unas horas antes de acostarte. Una vez congelada métela contigo en la cama, cerca de los pies para regular la temperatura mientras duermes.