¿Con o sin pijama? El debate sobre cómo dormir en noches de calor

Este fin semana del 9 al 11 de julio, España vivirá la primera ola de calor del verano y los termómetros podrán llegar a marcar 45 grados. La AEMET ha avisado de que el 10 de julio comenzarán a subir las temperaturas debido a la entrada de aire cálido procedente de África. En gran parte de la Península, exceptuando Galicia y la zona del Cantábrico, se superarán los 40 grados. El domingo se espera que sea el día más caluroso.

Frente al ascenso vertiginoso de las temperaturas toca protegerse: beber mucha agua y refrescarse constantemente. A la hora de dormir es muy probable que también se sufra el calor y se comience a dormir peor. Entonces empiezan a surgir las dudas de dormir o no con pijama y qué es lo que tiene más beneficios para la salud.

Muchas personas prefieren dormir sin nada de ropa, pues dicen sentirse más liberadAs. En cambio, otras prefieren sentirse protegidos. ¿Cuál es la mejor opción? ¿Qué dice la ciencia sobre una cosa u otra?

Beneficios de dormir con pijama

• Aunque el calor apriete, las temperaturas tienden a bajar por la noche y el pijama ayuda a que nos sintamos protegidos. De alguna manera, aunque suene raro, es una manera de protegernos del frío.
• Esto está ligado directamente con el punto anterior, ya que la sensación da cierto confort y eso hace que descansemos mejor.
• El pijama ejerce de barrera y nos protege de las bacterias que hay por la noche, es decir, los microorganismos bacterianos que se encuentren en la cama. Por ello conviene elegir un pijama que permita la transpiración.
• Como consecuencia de los dos puntos anteriores, se reduce el estrés.

Beneficios de dormir sin pijama

• Ayuda a la termorregulación, pues evita sudar excesivamente y así no interrumpir las fases del sueño. Además, con pijama se corre el riesgo de que al sudar este se humedezca y en un momento dado de la noche ese sudor se enfríe y nosotros con él.
• Ofrece se sensación de libertad.
• Permite la conciliación del sueño de manera más intensa pues facilita la relajación térmica y la relajación del cerebro.
• Favorece la regulación del sueño y del apetito. Se estimulan la hormona del amor, del crecimiento y la oxitocina, de esta manera, el organismo se regula y reduce el incremento del hambre.
• Reduce el estrés y la ansiedad, ya que al dormir sin ropa el cuerpo alcanza la temperatura ideal y esto permite que se mantengan regulados los niveles de cortisol.
• Mejora el riego sanguíneo, nos ahorramos la presión de las gomas elásticas de los pijamas.

No existe una fórmula universal que se adapte a los gustos de la manera de dormir de cada persona. Lo que sí hay que tener en cuenta son dos recomendaciones, si prefieres dormir con pijama debes elegir uno que permita transpirar fácilmente, que sea holgado para que facilite la comodidad, pues el hecho de dormir con pijamas apretados dificulta el sueño. En cambio, si de lo contrario prefieres dormir sin pijama, debes prestarle atención al tipo de sábanas, fundas o ropa de cama para regular bien la temperatura.