Esto es lo que tienes que hacer en caso de que tu hijo sufra un atragantamiento

Todas las personas podemos sufrir un atragantamiento, pero sobre todo los más pequeños, los niños que todavía no son conscientes que supone meterse en la boca piezas pequeñas o alimentos duros como los frutos secos.

Por lo tanto, esto es lo que tenemos que hacer en este tipo de situaciones:

1. Llamar al teléfono de emergencias si te encuentras al menor inconsciente en el suelo. Mientras llega el médico, debes empezar a reanimar al niño: le abres la boca y, si lo ves muy claro, le intentas sacar lo que se haya metido. Si no, espera a que lleguen los de urgencias. Asimismo, si el pequeño no respira ni le encontramos pulso, debes abrirle la vía aérea con la maniobra frente-mentón. Después de eso hacemos 5 insuflaciones profundas y, si la cosa sigue sin cambios, comenzaremos con las maniobras de reanimación cardiopulmonar.

2. Animar al niño a que tosa, siempre que esté consciente y tenga una tos efectiva. De esta manera, lo que se haya metido en la boca, saldrá.

3. Dar cinco golpes secos en la espalda si el niño está consciente, tiene tos pero no efectiva y se agote. Si sigue atragantado, tendremos que practicar la maniobra de Heimlich, que consiste en hacer unas compresiones que aumentan la presión dentro del pecho, creando como una "tos artificial". Si tu hijo tiene más de un año, las compresiones las tendrás que hacer en el abdomen. Pero si es un bebé, hay que cogerlo boca abajo, sobre nuestro antebrazo, con la cabeza un poco por debajo del resto del cuerpo, pero sin dejar de sostenerla, y darle cinco golpes secos en esa postura, en la zona que queda entre los dos omóplatos.

Ante cualquier duda, lo mejor es que llames al teléfono de urgencias y que te atienda un médico.