Daniel Guzmán: el barrio del que presume, su pasado grafitero y por qué no usa WhatsApp
Daniel Guzmán es un tipo de barrio. Presume de ello en sus entrevistas y en sus películas. El actor y director de 48 años sigue muy vinculado a las calles de Madrid donde nació, lo aprendió todo (incluso a hacer grafitis) y vuelve para que sus amigos pongan los pies en el suelo.
"Mis amigos del barrio son los que me ponen en mi sitio, los que me anclan al suelo. Sin estos amigos no sería nada", decía Daniel Guzmán en una entrevista con motivo de la presentación de Canallas, su segunda película como director en la que vuelve a darle un papel protagonista al barrio. Ya lo había hecho en A cambio de nada, su debut tras las cámaras que le valió el Goya a Mejor director novel en 2016.
Al barrio le debe el premio y también lo que es. “He tenido allí mi vida entera, mi época más importante. Marcó mi personalidad. La calle me ha dado respuestas y herramientas, una visión de la vida”, cuenta el actor que se define como "perro callejero" en su biografía de Twitter.
“Mis amigos han sido la familia que yo elegí cuando la mía estaba rota, esa familia no biológica sustituyó a la otra. Yo he vivido cosas con ellos que no te puedes imaginar”, contó en otra entrevista en El Correo.
Cuál es el barrio de Daniel Guzmán
El barrio de Daniel Guzmán es Aluche, en Madrid, escenario de su primera película y el lugar en el que forjó su personalidad combativa.
"Todo lo que sé lo aprendí en la calle, con mis amigos, regresando a casa con la cabeza abierta", contaba en otra entrevista con motivo de la presentación de A cambio de nada.
Daniel Guzmán no era el más querido de Aluche. "Era un pieza. No iba a clase y cuando iba la liaba. Estaba perdido, solo buscaba llamar la atención. Soy muy inquieto, he vivido mucho y eso me viene bien para contar historias", explicó el intérprete que en esa época se dedicaba a pintar los muros bajo el nombre de Tifón. "Se me ocurrió porque simbolizaba un paralelismo entre el fenómeno meteorológico y la firma, que dejaba huella por donde pasaba", contó en una charla con El Mundo.
De esa época y de su trabajo como grafitero habló en el documental Mi firma en las paredes que grabó en 1990 cuando tenía 18 años.
Por qué dejó 'Aquí no hay quien viva' y por qué quiere dejar de ser director
El documental fue un primer acercamiento de Daniel Guzmán a las cámaras, aunque su debut llegó cinco años después. 1995 fue el gran año de Daniel Guzmán actor.
Con 23 años participó en la película Hola, ¿estás sola? y en la serie Hermanos de leche y Colegio mayor. Los tres trabajos fueron su paso previo al que luego sería el papel que le dio a conocer: en 1996 se convirtió en hijo de El Fary en Menudo es mi padre. Dejó la serie dos años después para sorpresa del público ya que el actor fue sustituido por Borja Elgea, que muy poco tenía que ver con él (sobre todo en estatura).
Roberto, su mítico personaje en Aquí no hay quien viva, estuvo en pantalla entre 2003 y 2006. Por qué dejó la serie lo contó en una entrevista reciente en El Mundo: "No aguanto más de tres temporadas en una serie, porque hacer televisión es muy complicado, porque cambias el estándar de la interpretación y todo vale, pero no todo vale. Yo busco un resultado muy concreto y cuando se olvida ya ese resultado prefiero irme a otra cosa".
Tras Roberto llegó el Daniel Guzmán como director, un rol que tiene claro que ha terminado para él: "No quiero volver a hacer cine en mi vida, esta es mi última película. He hecho en 17 años dos películas, que no quiero decir que sean como mis hijos, pero en cierta manera me han quitado de vivir. Ahora quiero hacer cosas más convencionales. El cine me ha pasado factura en relaciones con amigos, con mis padres... He dejado de vivir. A mí el cine me dio la vida y como siga así me la va a quitar".
Boxeo, el otro gran debut de Daniel Guzmán
Daniel Guzmán tuvo otro gran debut en 2005, esta vez lejos de las cámaras. Ese año subió al ring para tomar la alternativa como boxeadoren una velada neoprofesional ante 5.000 personas en León.
El actor, en esa época protagonista de Aquí no hay quien viva, llegó al ring el mismo año en que estrenó la película A golpes, en el que da vida a un boxeador.
"A mí me gusta practicar boxeo como disciplina deportiva, y sobre todo, para saber esquivar, me gusta más esquivar que golpear. Creo que es un deporte de los más completos y me permite desconectar de mi rutina diaria", contaba en 2008 al hablar de este deporte que practica siempre que puede pero no regularmente. "Plásticamente, el boxeo profesional es muy bonito, y siempre o casi siempre los dos contrincantes acaban dándose un abrazo. Ya ves, soy un poco raro".
Por qué Daniel Guzmán no tiene WhatsApp
Entre las rarezas, por llamarlo de alguna manera, de Daniel Guzmán está su rechazo a WhatsApp. En una sociedad hiperconectada como la actual, Daniel Guzmán decidió en 2016 desinstalarse la app de mensajería instantánea.
"Lo tuve pero me lo quité para recuperar mi vida, para ser dueño de mí mismo, de mi intimidad y de mi independencia", contó en una entrevista en El Mundo. "Como es gratis, se pierde el contenido. No hay filtros, te mandan de todo y te meten en grupos. Había gente que se molestaba cuando no les contestaba. Tener que responder a 200 personas me generaba mucho estrés".
El día que Daniel Guzmán se tiró al Manzanares
Si lo del WhatsApp llama la atención, más llama la historia del día que Daniel Guzmán es tiró al río Manzanares de Madrid. Fue por una buena causa.
"A veces para memorizar los textos, me bajaba a pasear por el Manzanares. En una de estas, me encontré a una chica mirando raro un coche, como si lo fuera a robar", contó en una visita a El Hormiguero en 2018.
No le dio mucha importancia y siguió su camino, a su regreso no pudo evitar interesares: "Había un gato metido en el motor".
El gato, claramente en peligro, no quería salir y solo lo hizo cuando el dueño del coche abrió el capó. Salió escopetado hacia la M-30. "Yo salí detrás para que no se metiera. Conseguí que no entrara, pero salió corriendo hacia sentido contrario y yo seguía corriendo detrás de él", explicó Guzmán, que terminó junto al gato al lado del Manzanares. "El gato saltó y yo salté detrás. Solo quería buscarle un hogar de acogida, pero él no quería". Al final consiguió sacarlo y encontrarle una casa donde ahora vive feliz.
Enamorado de Nuria Roca y pareja de Blanca Romero
Daniel Guzmán habla por los codos. Tiene mil anécdotas que compartir, pero un asunto que mantiene bajo llave. Su vida más personal es un misterio.
Tanto es así que sorprendió mucho cuando en una visita a El Hormiguerole declaró su amor a Nuria Roca.
Aprovechando la ausencia de Motos por Covid, le hizo una confesión en el camerino que luego trasladó a plató. “Siempre he estado enamorado de ti”, le dijo a Nuria Roca.
Las declaraciones de Daniel Guzmán, siempre celoso de su vida privada, llamaron mucho la atención. Pese a llevar media vida (literal) delante de las cámaras, muy poco se sabe del corazón de Daniel Guzmán.
Fue noticia en 2005 cuando en pleno auge de Aquí no hay quien vivalo fotografiaron en la playa junto a Blanca Romero. Nunca confirmaron la relación como tampoco se confirmó si hubo más que palabras con Amaia Salamanca. En 2010 se habló de amor de verano, pero si fuese así poco duró. Ese año la actriz empezó su relación con el empresario Rosauro Varó.