James Cameron reconoce que Kate Winslet sufrió en el rodaje de 'Titanic': "Salió traumatizada"

Cuando Kate Winslet y Leonardo DiCaprio aceptaron ser los protagonistas de Titanic ninguno imaginó que esta película sería su lanzadera al estrellato internacional.

Eran jóvenes, casi nóveles y no conocían el temperamento de su director, James Cameron. DiCaprio tuvo un rifirrafe con él antes de comenzar a grabar, ya que el actor se negó a leer el guion y Cameron optó por despedirle si continuaba con su negativa. No quería riesgos. DiCaprio terminó cediendo y se convirtió en el inolvidable Jack Dawson. Tenía 21 años.

Kate Winslet, por su parte, solo tenía 20. Cumplió 21 a lo largo de la grabación, un trabajo que se tornó de lo más duro por las exigencias de su director "Tiene un temperamento para no creérselo", dijo en aquel momento, antes de que se convirtiese en un fenómeno audiovisual y la película fuese la que más dinero había recaudado en taquilla en toda la historia.

"Tendrían que pagarme mucho dinero para volver a trabajar con Jim", recogió el diario británico The Guardian por aquel entonces. Y parece que así ha sido. Kate Winslet ha vuelto a trabajar con James Cameron en Avatar: El Sentido del Agua, la secuela de la única película que ha conseguido superar a Titanic en taquilla, Avatar, estrenada en 2009.

La tensión que hace 25 años había entre ellos parece haberse diluido con el tiempo. La actriz ha transformado lo que en un principio fue una queja en comprensión y empatía. "Jim está mucho más tranquilo ahora. No puedo imaginar la presión que vivió en el rodaje de Titanic, con todas aquellas conversaciones en torno a la película. A medida que envejecemos, aprendemos a decir: ‘Cometí un error’. Todos mejoramos en eso, ¿no es así?", ha dicho recientemente a The Sunday Times.

Por su parte, Cameron ha reconocido que en aquel momento Kate Winslet sufrió las consecuencias de un extenuante rodaje con un sinfín de exigencias, cambios de horario y un frenético ritmo de trabajo. "Kate salió de Titanic un poco traumatizada por la escala de la producción y por su responsabilidad dentro de ella", ha declarado a Radio Times.

La carrera de James Cameron en el cine y su trabajo con diferentes equipos y personalidades conocidas le ha dado una fama de 'dictador' que ni siquiera se afanó en desmentir. Lo justificó y reconoció ser un director exigente. "Soy demandante y exigente con mi equipo de trabajo. En cuanto a ser algo dictador, creo que hay un elemento de eso cuando tienes que lidiar con miles de extras y grandes logísticas y también mantener a la gente segura. Creo que has de tener una metodología estricta al lidiar con muchas personas", dijo en 2007.

Un rodaje muy duro que dejó a Kate Winslet "helada, asustada y agotada"

Aunque parece que ahora todo ha quedado en agua de borrajas, el testimonio que Kate Winslet dio en 1997 a Los Angeles Times sobre el agotador rodaje de Titanic sigue siendo sobrecogedor.

"El primer día las grabaciones comenzaron a las cinco de la madrugada, y se prolongaron hasta la una. No estaba preparada para algo así. Hubo muchos días así, en que las tomas duraban 20 horas. Y dos terceras partes de esos días filmábamos de noche, ya que el Titanic se hundió por la noche. Cada cual tenía que estar por su cuenta en el set. Tenías que asegurarte de haber dormido algo durante el día, poniéndote una máscara oscura sobre los ojos. A veces almorzábamos a las dos de la mañana o comíamos a las cuatro de la tarde. Fue algo muy desorientador", contó la actriz antes de que la película recaudase mil millones de dólares en taquilla en todo el mundo.

La fatiga, el cansancio y los horarios intempestivos casi hicieron mella en la actriz. "Si parezco asustada, helada y agotada en la película durante las escenas de hundimiento es porque realmente estaba asustada, helada y agotada. Después de tres meses, me sentía físicamente hinchada, magullada y sola sin mi familia. Tuve que seguir pensando para mis adentros: ‘Tú querías esto, ahora solo sigue adelante", añadió