La fotógrafa de un hotel de Tenerife detecta un cáncer en un bebé tras hacerle unas fotos
Una familia inglesa encargó una pequeña sesión de fotos en el hotel donde se hospedaban por sus vacaciones y, gracias a las imágenes, se dieron cuenta de que uno de sus hijos estaba gravemente enfermo.
Una familia inglesa eligió Tenerife para pasar unos días de vacaciones en Navidad. Los padres, Sophie Frindlay y Darren Marshall, encargaron a la fotógrafa del hotel en el que se hospedaban una pequeña sesión de fotos de sus dos hijos, de siete y tres años, para guardar un bonito recuerdo de sus días de descanso juntos.
Alessia, la fotógrafa que realizó el encargo, procesó las fotografías en su ordenador una vez terminada la sesión y comprobó que había algo que no cuadraba.
En uno de los ojos de la niña pequeña, de solo 7 meses, se podía apreciar un punto blanco nada habitual. Pensó que se podría tratar de un efecto del flash de la cámara, pero ese punto blanco se repetía en varias imágenes y solo aparecía en un ojo, mientras que en el otro se veía un punto rojo, igual que el efecto clásico del flash.
Cuando los padres pasaron a recoger las imágenes, Alessia aprovechó para comunicarles lo que había encontrado. "Cuando estábamos en el hotel, le pedimos a la fotógrafa que hiciera algunas fotos de los niños, y cuando fuimos a recoger las fotos, nos llevó aparte y me pidió que echara un vistazo a las fotos de la niña", recuerda la madre en declaraciones a ABC.
En cuanto volvieron a su casa en Inglaterra, llevaron a la niña al hospital. "Allí nos dijeron que era realmente grave, fue terrible. Atrapamos el tumor a tiempo en un hospital de Birmingham", asegura. Tenía un retinoblastoma (cáncer de ojo), el cáncer infantil más común.
A finales de mayo, cuando la pequeña ya se había sometido a quimioterapia y estaba mejor, la familia decidió regresar a Tenerife. Aunque Alessia ya no trabaja en el mismo lugar, consiguieron localizarla para poder agradecerle que su hija se había salvado gracias a ella.