La Policía Nacional rompe el cristal de un coche para salvar a dos bebés abandonados en un párking de Menorca
Los padres de los pequeños, un bebé de un mes y otro de un año, dejaron a los niños en el coche "porque estaban dormidos" mientras salían a hacer unas compras en Mahón (Menorca), donde las altas temperaturas podrían haber provocado un final desgarrador. El equipo de Espejo Público estuvo en el lugar de los hechos.
Fueron dos agentes de la Guardia Civil que estaban fuera de servicio los que se percataron que dentro del vehículo se encontraban dos menores de edad, un bebé de un mes y un niño de un año.
Los agentes decidieron avisar a los padres del peligro de dejar a los niños sin ventilación en plena hora de calor haciendo un llamamiento a través de la megafonía del establecimiento, pero nadie acudió al aviso.
Dada la ausencia de los progenitores, los agentes dieron aviso a la Policía Nacional, que tras valorar el peligro de la situación, decidieron romper el cristal del copiloto con el codo. El agente que realizó la maniobra tuvo que recibir 6 puntos de sutura.
Los niños fueron rescatados en buen estado, pero no fue hasta una hora más tarde cuando aparecieron los padres con un carrito lleno de compra. La pareja, de origen magrebí, explicó a los agentes que los niños "estaban dormidos" y no quisieron despertarles.