Tener sexo no es el único factor determinante en la felicidad, pero existen evidencias científicas que demuestran los beneficios de las relaciones para la salud y el impacto positivo en el humor.

El placer estimula la segregación de endorfinas y oxitocina, las llamadas hormonas de la felicidad. La cuestión es, ¿durante cuánto tiempo?

Dependiendo de cada persona, los beneficios duran más de lo que se cree (hasta 48 horas) y afectan al resto de las relaciones en el ámbito personal y profesional.

Un estudio de la Universidad de Florida asegura que ese estado de felicidad puede durar hasta dos días después de tener relaciones sexuales. Ese bienestar beneficia a la salud de la relación.

Para conseguir llevar a cabo el análisis, se pidió a 200 parejas que anotasen todas las noches, antes de irse a dormir y durante 14 días, si habían mantenido relaciones o no y que valorasen su grado de felicidad en relación a la vida sexual, su pareja y la relación en general.

Los líderes del estudio advirtieron que los encuestados tuvieron de media menos relaciones que las que calculó el estudio sobre parejas felices, haciendo el amor 4 de las 14 noches de promedio.

A pesar de esto, los resultados confirmaron lo esperado; las valoraciones eran más positivas las noches en las que sí habían tenido sexo, y aportaron una sorpresa: su felicidad se alargaba hasta 2 días después.

Beneficios colaterales

Las conclusiones del análisis dicen que, más allá del bienestar evidente para cada miembro de la pareja, esto podría existir para garantizar la salud de la relación y, con ello, asegurar la reproducción. Algo que, más allá de si deseamos o no tener hijos, podemos usar a nuestro favor en momentos en que la relación no vaya bien.

El momento sí importa

Está demostrado que las relaciones más duraderas no conservan la pasión, sino que la planifican. Esto no tiene que frustrarnos ni avergonzarnos y puede mejorar la relación. Si bien la mayoría de parejas encuentra en el fin de semana (concretamente el sábado por la noche) el momento ideal para un encuentro sexual, dependerá del cronotipo de ambos cuándo tomar la iniciativa. ¿Eres de las que lo prefiere por la mañana? Es probable que tu personalidad se acerque mucho a lo que el Dr. Michael Breus llama Delfín. Pero hay hasta cuatro cronotipos o ritmos de vida diferentes. Sólo es cuestión de cuadrar el tuyo con el de él.

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