Cómo la alimentación puede aumentar el deseo sexual, pero no con afrodisíacos
Una dieta y unos hábitos saludables mejoran muchos aspectos de nuestra vida, entre ellos, la sexualidad.
Una dieta y unos hábitos saludables mejoran muchos aspectos de nuestra vida, entre ellos, la sexualidad.
En pareja o de manera individual, los juguetes eróticos a distancia, que se controlan con el móvil, son una puerta a nuevas formas de vivir la sexualidad
Leer novela erótica y otros géneros estimula nuestra creatividad sexual, estrecha el vínculo con nuestra pareja y ayuda al autoconocimiento
Aunque a priori pueda sonar falso, lo cierto es que existe una conexión entre el ejercicio físico y los orgasmos: el coreorgasm. Pero ¿es realmente posible tener un orgasmo mientras trabajo mis abdominales? La respuesta te puede sorprender.
La sexualidad no está reñida con la sostenibilidad, a la hora de comprar un producto erótico debemos asegurarnos que no daña nuestra salud ni el planeta. También podemos cuidarlo para alargar su vida útil y reciclarlo cuando ya no funcione.
Ni duele, ni es solo para hombres cis homosexuales. El sexo anal puede ser muy placentero para cualquier persona. Lo importante es saber qué pasos seguir para ir iniciándose poco a poco y acabar con los estigmas de esta práctica. ¡Merece la pena!
Mantener relaciones sexuales mientras se está menstruando no solo no es malo, sino que hacerlo tiene múltiples beneficios.
El pene no es un órgano básico. Pese a que tiene mucha menos terminaciones nerviosas que el clitoris, hay otras formas de estimularlo más allá del coito. La masturbación y la autoexploración son clave para descubrir lo que a uno le gusta en el sexo en pareja, y también hay juguetes eróticos que ayudan a mejorar las relaciones.
Según algunos estudios, solo un 30% de las mujeres llega al orgasmo durante las relaciones sexuales con su pareja. Descubre algunas posiciones que podrían mejorar el rendimiento sexual y ayudar a alcanzar el clímax antes.
Antes de decidir qué hacer con una fantasía sexual, lo primero es identificar qué tipo de fantasía es. Hay cuatro diferentes y cumplir algunas de ellas no siempre es buena idea.