IRLANDA | POLÉMICA

Un hotel de Dublín reprocha a una 'youtuber' que le pidiera 5 noches gratis y veta a todos los ‘influencers’

No es la primera historia similar que conocemos, ni será la última. Una influencer se puso en contacto con un hotel en Dublín para proponerle un intercambio. La británica Elle Darby, con 87.000 suscriptores en YouTube y 76.000 seguidores en Instagram, envió un correo a The White Moose Café para pedirles cinco noches gratis a cambio de mostrar el hotel en sus redes sociales, la respuesta del establecimiento provocó un aluvión de críticas a la joven, que no ha tardado en contraatacar en su canal de vídeo.

La influencer Elle Darby
La influencer Elle Darby | YouTube

Europa FM

Barcelona22/01/2018 12:30

Elle Darby, de 22 años, le escribió un correo al dueño del local, Paul Stenson en el que decía: "Trabajo como influencer en redes sociales, sobre todo en temas como estilo de vida, belleza y viajes. Mi pareja y yo estamos planeando ir a Dublín para pasar el fin de semana de San Valentín, del 8 al 12 de febrero, y conocer la zona. Mientras buscaba lugares para hospedarme, encontré su impresionante hotel y me encantaría enseñarlo en mis vídeos de YouTube y en mis historias y publicaciones de Instagram para llevar clientes a su hotel y recomendarles a otras personas que hagan reservas en su establecimiento. A cambio de alojamiento gratuito". Además, les dice que ya hizo algo parecido en Florida, y que el establecimiento quedó encantado: “ha sido increíble para ellos”.

Sin embargo, el dueño del hotel no solo no aceptó la colaboración propuesta por la influencer sino que le contestó de forma contundente además de publicar su email en la página de Facebook del hotel: "Querida influencer. Gracias por tu correo electrónico en busca de alojamiento gratuito a cambio de publicidad. Se necesitan pelotas para enviar un correo electrónico como ese. Si te dejo dormir aquí a cambio de salir en un vídeo, ¿quién va a pagarle al personal que cuida de ti? ¿Quién va a pagar a las camareras que limpian tu habitación? ¿A los que te sirven el desayuno? ¿La recepcionista que te registra? ¿Quién va a pagar por la luz y el calor que usas durante tu estancia? ¿Tal vez debería decirle a mi personal que aparecerán en tu vídeo en vez de pagarles por el trabajo que hacen mientras estás en la residencia? Mis mejores deseos. P. D. La respuesta es no".

Stenson no dijo quién le había enviado el correo y no podía leerse el nombre del remitente, pero sí aparecía el dato de sus seguidores en YouTube e Instagram y algunos seguidores de Darby reconocieron que se trataba de ella. Le enviaron la captura por Twitter, y ahí comenzó lo que ella califica como un acoso por parte de muchos usuarios que reprochaban su actitud.

Darby no dudó entonces en subir un vídeo a su canal de YouTube titulado I was exposed (So embarrassing) ("Fui expuesta, qué vergüenza"), en el que explica sus “buenas intenciones” con el hotel y cómo ha sido criticada sin motivo. "Soy una chica de 22 años que dirige su propio negocio desde su casa, y no siento que haya hecho nada malo. No sé cuál fue su intención (en referencia a la contestación del hotel), pero fue cruel".

Pero el dueño del hotel no paró ahí, y tras el vídeo de Darby publicó en su página de Facebook otro mensaje en el que vetaba directamente a todos los bloggers del establecimiento: "Tras los comentarios recibidos después de pedirle a un influencer que pagase por una habitación en nuestro hotel, he tomado la decisión de vetar a todos los bloggers de nuestro hotel y cafetería", y añadía: “Si alguno intenta entrar en nuestras instalaciones a partir de ahora, será expulsado”. “Nunca pensé que nos inundarían de críticas negativas por la simple razón de que alguien tenga que pagar por los bienes recibidos o los servicios prestados”.

También en Snapchat el hotel cuestiona las bondades de una colaboración como la propuesta por Darby: "Habría hablado muy bien sobre el hotel solo porque lo estaba disfrutando gratis".

¿Abuso o intercambio comercial? ¡La polémica está servida!